SOY GRACIELA SERRA Y VIVÍ EN LA RÍTMICA "COMETAS DE BOEDO"
8 de agosto de 2010
El calor raja la noche.
La noche cae tostada
sobre el río.¡Qué grito,
qué grito fresco en las aguas
el grito que da la noche
quemada!Rojo calor para negros.
¡Tambor!
Calor para torsos fúlgidos.
¡Tambor!
Calor con lengua de fuego
sobre espinazos desnudos...
¡Tambor!
Tardé menos de una hora en descubrir quién balanceaba mejor el impulso descabellado de las piernas en los ensayos. Pacha. Enormemente pasado de rosca en la elegancia del caminar pausado en la vida cotidiana. Luto.
"Tengo este tatuaje de un ojo llorando mucho..."
Qué querés, bailá como tengas ganas. Grita mucho en seis segundos y organiza filas de gente que entra a montones a la canchita de tres veces por semana, somos como trescientos, miles de voces semejantes, todos ahora, y a danzar.Me cansé hasta los más hondos desafíos de los tambores.Dormirme, necesitaba. Y soñar.
El agua de las estrellas
empapa los cocoteros
despiertos.
¡Tambor!
Alta luz de las estrellas.
¡Tambor!
El faro polar vacila...
¡Tambor!
¡Fuego a bordo! ¡Fuego a bordo!
¡Tambor!
¿Es cierto? ¡Huíd! ¡Es mentira!
¡Tambor!
Costas sordas, cielos sordos...
¡Tambor!
Las islas van navegando,
navegando, navegando,
van navegando encendidas.
Regresé de aquellos nacionales ensayos de Diciembre de 1998, durmiéndome. El estilo era el trance, me hacía doler el estampido de tanto bombo, más de setenta, pienso yo,se doblan en más de cuatrocientos. Dirige Pacha. Y durmiendo aprendía la coreografía de los cuatro días siguientes:a la República De Los Niños entraba sigilosamente a las 06:00 de la mañana.Amaneciendo, guantes en las manos.Pilas de pesas. Andando ensoñaba que de la luz del amanecer asomaría la canción próxima acumulada dentro de mi auricular.
Y a la tarde, caer nuevamente durmiendo. Dormida, estaba siempre bailando, todo el cuerpo resonaba, la mitad del alma tumbaba como retumba la tumba tumba en la noche que tiene murga de soñar que alcanza.
Despertar transpirando todo mejor todo lo mejor de tanto esfuerzo. Y otra vez subir al tren hasta llegar a Boedo. Gustavo Antón danza como los pájaros. Es un halcón quizás, a veces gaviota, pero de salto en salto inunda la canchita de gritos salvajes. Produce miedo tanto exaltante vapor sombrío. Arranca desde su propia sombra, lo narra así. Vive de un alarido a otro. Suman gente y vuelve al siguiente alarido.Es un vozarrón que, narra la historia, viene de los pregones de los canillitas.Este no. Sale de un corazón acostumbrado a todos los tipos de sufrimiento. Y logra creer que la vida es bella en justo todos los mejores momentos de un salto, otro tambor, y el próximo grito hondo de garganta.
Ellos son dos directores.
Directores De Murga Porteña y Nacional.
Vencí todo prejuicio menor o mayor que anduviese estancado en mi corazón relacionado con toda danza. Es dable decir que toda danza técnica, dobla siempre desde los mismos lugares a establecerse por los mismos escritorios:sale de una, y rotula por siempre.
Lo más escrito en mi cuaderno, mi propio cuerpo en vida, no se ha borrado jamás de los paseos que llevo en la ciudad. Y transcurrieron más de 12 años.
Por los talles y cintureos de mi caminar, bamboleo caderas. Y bamboleándolas, sigo sintiendo que América es del todo negra.
¿Cómo fue que aquella vez ningún toro derrumbo al torero, como para disfrutar de la canción mezquina?
Tristeza.
Cual cristalina serenata, manos a la altura de los tobillos,codos en la desenredada espalda, blancos guantes de superchería, en todas las ferreterías se venden. Mandó Tavi a comprar. Antón.
Cada canción, cada semejanza si puedo llamar así a mi cotidiano entrar a danzar, siempre saca primero afuera, hay que sacarlo todo afuera como la Primavera,el golpe de un talón. Se me dibuja de lágrimas el pelo si miro alrededor y jamás los encuentro trabajando de sudor en sudor, por el supremo amor de la cultura. Fríos.
Gélidos, pésimos, deprimidos.
Y dale a joder la musiquita no dice nada, dale a joder como estaremos de mal la basura te tiene en la trampa. Mañana tampoco te lo va a dar.¡Tambor!
Será que son los gorilas, que andarán por ahí.
Salí de Boedo en las infinitas tardes de Febrero, cansada de una traición:me costó aceptar muchos años que el truco de la percusión, daba el muy difícil trabajo de las horas miles de horas de los días.
Eso me costó y duele todavía, por ejemplo, como el Viernes, dentro de la melodía que acompaña Martín Zalazar, un salvaje. Duele escucharlo mucho. sangra dejarse acariciar en su seducción.
Tantos retumbes, me retocan ya. Otra vez con el caballo cansado vuelta de nuevo a empezar.
Estamos entrando en la morada de MOMO, andan rugiendo de amor los pimpollos blancos o rojos.
¡Arriba PUPITA LA MOCUDA en el IUNA!
Ahí sí que siempre será carnaval, si nos dejan.
Un beso Pacha. Estás eternizado en mi vida. Vos también Tavi. Son siempre de una sola vez y para siempre los palos de la baraja.
Poema siempre Nicolás Guillén.
Soy Graciela Serra. La Plata. Argentina.
Investigación Teatral y Vanguardia
http://www.proyectoazul.com.ar
Esta maravillosa y prestigiosísima foto de el CENTRO MURGA LOS COMETAS DE BOEDO fue tomada hace dos años del espacio en Fotolog de uno de sus integrantes. La escritura sobre la foto fue difundida por mí dentro de nuestro foro de Centro Latinoamericano de Creación e Investigación teatral, y todos los medios de comunicación de la ciudad de La Plata. Graciela Serra.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario