sábado, 30 de octubre de 2010

CARNAVALES EN LA BOCA
*Una tradición que deslumbra*

Contribuciones
de los vecinos y vecinas
del barrio porteño de La Boca: 
Gabriela Elizabeth Lamagna
Leticia Amoroso
Lidia Cerratana
Edgardo Salvemini
Héctor Aguirre
Omar Ricardo "Sordo" Cigliutti
¡Muchísimas gracias a todxs
por sus valiosísimos
y generosos aportes!




miércoles, 27 de octubre de 2010

"Suardi, los feriados y los pensamientos únicos"
Por Ramiro de Los Guardianes de Mugica


Probablemente no debería estar escribiendo esto, que es un pequeño paréntesis entre situaciones feas, personales y también de la murga que soy parte, con problemas feos en el barrio que afectan a la murga, y otros que nos duelen. Pero seguramente tiene que ver con esto, con la alegría que muchas veces buscamos en un carnaval como paréntesis para muchos entre momentos jodidos.

En estos días la comunidad murguera y carnavalera en general estamos con dos temas simbólicamente muy fuertes. Por un lado, se acerca el 11° Encuentro Nacional de Murgas, “la revancha” como le pusieron los Sincaretas, seguramente inspirados en la tormenta que sufrimos el año pasado, que arrasó el camping y nos dejó pasados por agua (y con un flor de cagazo, vale aclarar), evento muy importante para muchos murgueros de todo el país, y bautizado por muchos como "el" evento. Más allá de los debates, particularmente me parece un hermoso encuentro y lamento que no voy a poder ir este año, a diferencia de los últimos cuatro. Va a ser raro no estar.

Por otro lado, fue presentado un Proyecto de Ley de Ordenamiento de Feriados, el cual lleva a quince los feriados anuales y reinstala los feriados de carnaval por lo que tanto venimos luchando muchos murgueros. El proyecto de ley, no es un proyecto de carnavales pero sí contiene la restitución de los feriados y la derogación de la ley 21329/76, que es la ley que la Junta Militar nos impuso en junio de 1976 y con la que nos quitó los feriados y, peor aún, reprimió persiguió y censuró nuestros festejos, llegando a casi borrarlos de la memoria colectiva. Esa ley, además de quitarnos los feriados, quitó la identificación colectiva que nuestro país tenia con los carnavales. Lo que era de todos, lo que todos celebraban, se convirtió en marginal, fue silenciado y casi eliminado.

Suardi y el movimiento nacional

Si bien existen otros encuentros, algunos muy interesantes (particularmente me ha marcado la Marcha Carnavalera de La Plata, donde por primera vez asistí a este tipo de encuentros hace varios años ya, pero existen otros espacios, como el encuentro en Fyske Menuco, Saladillo, el “Correla” en Mar del Plata, Otamendi y otros) es Suardi el Encuentro Nacional de mayor trascendencia, si bien ya he aclarado que no es el único ni mucho menos “lo único” que pasa durante el año murguero: más de diez años de continuidad e historia del encuentro, cifras de cuatro dígitos en cantidad de visitantes en los últimos años y la trascendencia que tiene; se ve en numerosos eventos en Buenos Aires donde se habla y hasta se le canta a Suardi.

En ese contexto muchos murgueros visitamos Suardi, nos encontramos con nuestros pares de Córdoba, Rosario, Mendoza, etcétera, disfrutamos de la calidad artística de Falta un Tono, ese murgón jujeño que muchos sólo podemos ver en Suardi, o reírnos con el ingenio de los espectáculos improvisados de Okupando Levitas, o de toda esa diversidad con la que nos encontramos cuando vamos al encuentro en Suardi. También algunos (y me incluyo) esperamos para asistir a las asambleas que se organizan en el campamento, como espacio de construcción y deliberación para avanzar con la construcción del Movimiento Nacional de Murgas.

Sin embargo, es importante tener en cuenta la diversidad que hay dentro del encuentro de Suardi. Somos muchos los que participamos de las asambleas pero también son muchos los que no y, no obstante, anhelan el encuentro y se preparan todo el año para estar presentes. Si bien es claro que hay puntos en común y que no solo los concurrentes al encuentro sino muchas personas más adherimos a esos puntos (recuperación del carnaval, de los feriados, corsos libres y gratuitos en todo el país, libertad de expresión, no a los milicos, etcétra), tampoco es correcto adueñarse de la voz de todas y todos para escribir documentos (como podría ser esto, con la diferencia de que acá firma una persona no un movimiento) y firmarlo como Movimiento Nacional, adjudicándose la voz de miles sin siquiera consultarles. Algo que muchas veces pasó en distintos espacios en Buenos Aires: pasó con la Comisión de Carnaval y el espacio excluyente que se generó, pasó con la Agrupación M.U.R.G.A.S y con el Frente murguero. Y lamentablemente puede que pase con el Movimiento Nacional (a pesar de unos cuantos que para nada deseamos eso).

Construir un Movimiento Nacional supone tener en cuenta todas las voces, todas las características, todas las situaciones, incluso lo que no hay en el encuentro pero existe (muchas murgas no pueden ir por problemas económicos, de distancia, etcétera) y que todo sea contemplando en las decisiones que se toman; no sólo para “chapear” sino para que haya carnaval en todos los barrios, desfilen todas las murgas, se oigan todas las voces y se expresen todos los barrios (al menos todos aquellos donde haya murgas o la intención de formar una).

Falta dar algunos pasos para que el Movimiento Nacional pueda llegar a tener un importante nivel de representatividad. Por un lado, falta fortalecer los espacios regionales. Por otro, desarrollar más espacios de inclusión. Un buen ejemplo puede ser el Campamento Murguero que se realizó en Moreno, y que se repetirá el año que viene (están proyectados dos Campamentos: uno, para Semana Santa y otro para la segunda mitad del año), pero no es el único. No dejar de pensar en el barrio, pero tampoco en el de al lado, para construir todo el año en el barrio y con las murgas vecinas y no reducir las intervenciones a viajecitos y asambleas fetiche.

Nuestros feriados en el Congreso ¿conquista o engaño?

Si se aprueba la ley, particularmente no tengo dudas de que será una conquista. Si no se llega a aprobar será un engaño más, un golpe a todos nosotros, una falsa ilusión. Pero confiemos en que se va a aprobar. ¿Y después?

La ley no tiene nada criticable, nada negativo, porque simplemente reordena los feriados y deroga, entre otras, la ley de los milicos. Lo criticable sería lo que no dice, lo que falta, lo que no sabemos. Lo del turismo no me parece un tema grave, en la medida que no afecte negativamente lo que nos falta construir. Es obvio que cualquier legislación sobre los feriados (cualquiera de ellos, no sólo nuestros feriados de carnaval) va a estar impregnada de esta miserable concepción capitalista. Que el 17 de agosto se pase a lunes para “aprovechar el finde” debería ofender a los sanmartinianos, tanto como la explotación turística en Semana Santa a todo cristiano. Si Clarín habla del turismo o se esgrime ese argumento es porque buscan otros fundamentos para que esto - que para nosotros es una conquista - se apruebe. Si bien ese no tiene que ser nuestro principal argumento, ya que para mí lo es recuperar nuestra fiesta popular y el derecho a la libre expresión como fue siempre el carnaval… ¿Quién no ha argumentado para defender a su corso o la existencia de su murga como el corso ayuda a la economía del barrio?

Sin embargo, pese a que no me preocupa el carácter “turístico” si me preocupan otras cosas, vinculadas al futuro. Como por ejemplo que se descalifique a quien críticamente plantea el problema del turismo como el gran problema, con un simple “vos no sabés nada” o “te falta aprender” pero sin fundamentar nada, sin debate. Si un compañero cuestiona, aunque no me parezca importante o acertado ese cuestionamiento, bienvenido sea. Bienvenido el debate si buscamos en él, avanzar a un carnaval para todos, popular, masivo y libre. Como si estuviéramos obligados a un festejo enceguecido de una conquista que todas y todos deseamos, que está por llegar, pero que todavía falta un paso para concretar.

En todo caso, la preocupación por un supuesto “feriado turístico” lo que debería generar es una motivación para construir lo que falta, para llenar de contenidos estos feriados que están por llegar. Si no, caemos en los mismos reduccionismos que hicieron de la Comisión de Carnaval un espacio discriminatorio e injusto y que un par de años después, hicieron que más de uno “pise el palito” con el feriado trucho de Capital Federal, ese asueto para empleados públicos impulsado por legisladores en ese entonces macristas (sí, el mismo que hoy recorta presupuesto y caga a medio mundo). Por suerte siguen los debates y no se quedan en un “vos no sabés”. Pero ¡guarda! que ese “vos nos sabés” está hace tiempo entre nosotros y, encima, muchas veces para silenciar reclamos (que al menos yo considero) legítimos.

Por la alegría, el carnaval y contra los pensamientos únicos
El carnaval tiene una historia, mucho mayor que la de nuestro país. En sus siglos de historia, siempre estuvo la alegría y la parodia crítica. Las fiestas folclóricas del carnaval siempre tuvieron matices subversivos, críticos y paródicos de los sistemas establecidos. Tanto presidentes, como monarcas (cuando todavía los estados no eran gobernados por presidentes) han sido parodiados y criticados durante los carnavales, el mayor espacio de expresión que los sectores populares tuvieron durante siglos. El culto cómico del carnaval convertía a las divinidades en objetos de burla y blasfemia. Esto explica también la rica historia de prohibiciones que tiene nuestro carnaval, y cuya culminación (hasta estos días) fue la ley decretada por la junta militar en 1976.

Hoy puede haber muchas formas de expresión, distintas formas de festejar nuestros carnavales, y la recuperación de los feriados va a ser un avance. Pero ese avance no puede quedarse en el simple hecho de tener dos feriados, ni tampoco en la negativa a opiniones diversas. Si queremos un espacio amplio, tenemos que poder incluir a todos, y no quedarnos con la “militancia de palabras”: que un documento diga que somos revolucionarios no aporta nada, que se quiera sacar al encuentro de Suardi aunque no sea eso lo que quieren sus anfitriones tampoco, que muchos se digan populares, pero miran para otro lado ante las desigualdades, o cuando se excluye a murgas de determinados espacios tampoco.

El ingreso o no a la Casa Rosada podrá ser un evento histórico para algunos. Para mí, no. El evento histórico va a ser cuando en febrero haya un lunes y martes que en lugar de estar laburando estemos festejando el carnaval, criticando a las autoridades en lugar de sacarnos fotos con algunos (más allá de la afinidad política que se pueda tener con determinada gestión). Festejando entre iguales, como fue, es y será, en la esencia del carnaval. Me guardo una parte de los festejos para cuando se apruebe la ley; la parte más importante me la guardo para febrero, seguramente con gran parte de los problemas que tenemos en la 31 solucionados y festejando una vez mas nuestro carnaval, pero esta vez con feriados. Diviértanse en Suardi los afortunados que van, y ¡feliz carnaval para todos! Y hablando de libre expresión… ¡¡¡¡justicia por Adams Ledesma!!! (Qué la alegría no nos haga olvidar.)

miércoles, 20 de octubre de 2010




SE REPRODUCE POR GENTILEZA


El desaparecido Tito Conti, dueño del Bar La Academia (luego denominado “Bar de Conti”) nos relató una vez acerca de los viejos carnavales, donde aparecían comparsas coloridas y con apelativos curiosos.
En medio de la nostalgia por esos años (tal vez de sus años jóvenes) don Conti relataba el caso de una comparsa, denominada Los Negros Escoberos, al parecer – según sus dichos- formada por gente de mal vivir.
Eran gente blanca, que con los rostros pintados de negro, simulaban africanos, con vestidos de colores y portando cada uno una escoba como signo o emblema. En una entrevista con el antropólogo Nino Volpe, don Conti decía:
“...los negros escoberos partieron de la esquina de Iriondo y Vélez Sarsfield, los famosos negros escoberos de los carnavales, que en las escobas tenían un cuchillito, algo, por si había algún lío, esos eran los famosos negros escoberos…”
Tito Conti abundaba, ya en nuestra entrevista, que estos singulares participantes de los corsos eran bastante peligrosos, ya que en las escobas, bien oculta, estaría un cuchillo u hoja filosa, que los tornaba, al menos, “riesgosos de tratar”.
La esquina de Vélez Sársfield e Iriondo es, en la memoria barrial, la más antigua del barrio, y se identidfica con el origen.
Curiosamente, el también fallecido Luis Doufour y el historiador del barrio, Salvador Terrazzino, aseveran la misma cosa: la existencia de un grupo de personas, “cuchilleros” que formaron una comparsa denominada Los Negros Escoberos, que portaban el cuchillo, entre las pajas de su emblema, la escoba.
Leamos a don Terra, en su libro ¿Remember, Refinería?: "En épocas de carnavales, aquellas de los famosos corsos de barrio, en la cortada Arenales se formaba una murga, la de los “Negros Escoberos”. El director dirigía la batuta y cada cual respondía haciendo su parte, todos disfrazados y pintada la cara con carbón, uno con ropas de mujer portaba una escoba que tenía la particularidad de llevar un cuchillo disimulado y oculto en la punta, que usaba sin hesitar en casos de agresión por murgas rivales…”
El autor enfrenta las murgas de escoberos de Refinería con las de Tablada, ambos barrios conocidos como “Barrios de la Puñalada”. Estas peleas según el historiador eran por “defender el territorio” y “por el gusto de pelear”. Arenales es el "Refinería Profundo", el sector donde estaba lo más pobre del barrio, pero también era parte de los orígenes de Refinería. paradójicamente, el libro de Terrazzino abunda mucho más en Avenida Alberdi que en esos lugares antiguos.
No era de extrañar que las historias barriales más antiguas surgieran de los lugares mas viejos, incluso las más raras, sabrosas o particulares.
Sin embargo, la ocurrencia de disfrazarse de negros para carnaval no era original.
En Buenos Aires era famosa la Sociedad Los Negros, allá por 1880, que festejaba los carnavales. Todos eran blancos pintados al carbón, pero se fotografiaban a "cara limpia". También eran conocidos por 1910 los Negros del Cake Walk, de inspiración jazzistica, a la Al Jolson, gente blanca con rostros ennegrecidos y levitas rayadas.
En 1900, según sabemos por Rafael Ielpi en su libro “Vida Cotidiana. Rosario (1900-1930)", nuestra ciudad tenía dos grupos de este tipo: La Sociedad Los Negros Africanos, y Los Pobres Negros Africanos, que bailaban en “troupes”, formaciones luego llamadas murgas.
En Santa Fe, las comparsas más famosas eran Los Negros, de 1883, formada por obreros (blancos). Se recuerda al mulato Demetrio Acosta, apodado El Negro Arigós (apellido de su familia adoptiva), que formaba parte de una comparsa de 1901 llamada Sociedad Coral Carnavalesca Negros Santafesinos. Arigós- un negro de verdad, era el bastonero, y usaba una escoba muy adornada con flores y cintas. Arigós, ya mayor, participaba sentado en una silla, pero su líderazgo continuó hasta su muerte en 1951 a los 73 años, lamentablemente 16 días antes que su murga cumpliera 50 años, meta que era su esperanza.
Recordemos que los negros sobrevivieron en Santa Fe hasta hace relativamente pocos años. Rosario posee otro tipo de conformación histórico-demográfica, que hicieron siempre a ese grupo social menos influyente en las tradiciones.
Es indudable la coincidencia entre los tres entrevistados (Conti, Terrazzino y Doufour), pero dejaremos por ahora de lado la existencia real de estos personajes, los cuales bien pudieron tener nombre y apellido, pero también formar parte de un folklore muy particular.
Veamos el origen de estas curiosas murgas, que lo tienen bastante definido.
Los negros, tanto en Argentina como en Uruguay, provenían de diferentes etnias de Africa, y desarrollaron, a lo largo de los siglos XVII y XIX, una cultura amalgamada a la española, donde vivían su tragedia de hombres cautivos de por vida.
Entre las costumbres de los africanos estaban sus rituales sociales y religiosos, uno de los cuales se volvió famoso: el candombe o candomblé.
Oscar Montaño, en la revista Oralidad Nº16, publicada por la UNESCO (2009), habla del candombe como la danza y la expresión musical-religiosa más importante de los negros en estas tierras.
Esta palabra provendría de la palabra ka (Las) y Ndomble (naciones de Angola).
Consistían sus ritos en bailes coreados, con un director de la ceremonia y varios personajes característicos, propios de estas ceremonias sociales y al mismo tiempo, religiosas. Cada nación poseía sus ritos, su rey y sus guerreros, su santo principal era, generalmente, San Baltasar, el rey mago negro (imagen a la derecha).
Los candombes, ya como danzas negras y en este esquema social, se practicaban por naciones, o sea por tribus. Las danzas eran mixtas, y no por pareja, y cada danzarín tenía una parte rigurosamente establecida en el baile, que era también un ritual.
Cada tribu “competía” en el baile, a fin de destacarse, ya que no podían establecer una guerra por el predominio local, en un país donde estaban cautivos. Al integrarse a la sociedad colonial, ofrecían estos bailes a las autoridades coloniales como un homenaje, y ese es el origen del baile pautado, desfilando, que luego copió la murga del siglo XX.
En esos bailes, los personajes típicos eran La Mamá Grande, o personaje maternal, sabio y bondadoso, siempre vestida de blanco y Reina de la Comparsa; el Portabandera, que identificaba al grupo; el Gramillero o brujo, de galera, con sus hechizos y misterio; y finalmente el famoso Escobero. Éste era un personaje director, con su vestimenta particular.
Con el torso desnudo, vestía un pantalón corto generalmente rojo o verde, sandalias atadas con cintas, y un mandil o delantal de cuero con espejitos que brillaban al bailar. Su escoba estaba decorada con tela, espejos, cuentas, cintas o flores.
Era el que conducía la murga, el bastonero y a la vez el líder. Su canto era rítmico y regulado, acorde a los tamboriles, y formando un pie musical o estribillo:
- ¡Calungan-gue, calungangué!
Y el resto de la murga respondía varias veces, acompañando los tambores:
- ¡Oye-yé- yumbambué! ¡Oye-yé- yumbambué! ¡Oye-yé- yumbambué!
Al competir con otras Naciones por la espectacularidad en los desfiles, se hacían los llamados candombes a la buena, donde los Escoberos peleaban entre sí, siempre danzando, por el predominio tribal. Para eso, trataban de hacer caer a su rival mediante zancadillas, golpes ocultos y, por supuesto, mediante su escoba como arma, generalmente para trabar ágilmente las piernas del adversario. Esto era parte de la danza misma, y la habilidad era una virtud. El Escobero también era mago, y atraía y provocaba la buena (o mala) suerte. La escoba "abría el camino" a la suerte de la murga.
De todo esto, podemos hipotetizar la suposición posterior que el escobero era un personaje hábil, tramposo, ladino y a la vez, admirado.
Las Naciones se desafiaban en lo que aún hoy en Uruguay se denominan “llamadas”: desafiantes cantos de "guerra" para la competencia entre murgas en carnaval.
Podemos aventurar que las murgas de los carnavales rosarinos recordaban a este personaje del candombe, y Los Negros Escoberos bien podrían llamarse, de alguna manera, “De los Bastoneros”, ya que en el candombe, el escobero era uno por Nación africana, y uno por murga. Culturalmente, era imposible más de uno por grupo.
Entonces, la adopción de formas culturales negras, mediante la deformación que suponía adaptarlas al carnaval europeo-argentino, presupuso necesariamente una nueva concepción. Los Negros Escoberos rosarinos, dada la memoria popular y al derivar de características antiguas, como "imagen" deberían ser gente ladina, y hasta cruel, peleadora y combativa, recordando lejanamente a los viejos directores del candombe africano.
La escoba, en su significado original, hasta podría haberse continuado en la actual superstición popular de no barrer frente a alguien, para no "barrerle la suerte".
De todo esto provendría según nosotros, el cuchillito en la escoba, la mezcla del personaje femenino mentado por Terrazzino (recuerdo tal vez de la Mamá Vieja) , la “lógica- ilógica” de la pelea (la “puñalada”) por gusto o un discutible predominio, en una rivalidad entre barrios lejanos, algo absurda y hasta de dudoso beneficio.
Debemos también recordar que los escoberos de la murga eran blancos, varios de ellos tal vez criollos o inmigrantes, y que los corsos barriales eran localizados, limitados a tres o cuatro cuadras, no mucho más.
Podemos hipotetizar que los Negros Escoberos son una creación popular –sea real o legendaria- en base a vestigios de culturas lejanas, extrañas y por ende atrayentes y motivadoras. Fueron una murga y un exotismo, es cierto, pero menos interesante que su danza fue esa escoba traicionera.
Nada mejor que estos ingredientes extraños para crear una leyenda, y bastó el sabor de lo viejo, exótico y peligroso para recalcar el detalle: sin ese cuchillo en la escoba, nuestros tres vecinos hubiesen olvidado la historia sin pena ni gloria.
Para el Museo, la verdadera existencia (existencia histórica) de Los Negros Escoberos no es en el fondo importante: se reduce a un dato. Pero sí nos interesa la supervivencia de rasgos africanos en una cultura aluvional - inmigratoria fuertemente europea.
Podemos afirmar que Conti, Dufour y Terrazzino nunca se arrimaron siquiera a estos personajes. No dan nombres, ni siquiera dan fechas o épocas de esas correrías carnavalescas: bien pudieron ser en 1900, 1930 o 1950. Suponemos el período entre 1930 y 1950, época en que el barrio era "bravo", por la alta desocupación y la marginación consecuente, aunque es una mera suposición. Ninguna revista (monos y Monadas, Gestos y Muecas, Plumazos) ni de ésta ni de épocas anteriores, menciona la comparsa, ni siquiera los carnavales, ya que era un barrio esencialmente obrero, aunque las crónicas burlonas sobre el barrio o acerca de las fiestas en Avenida Alberdi son frecuentes.
Ya en la década del 50 al 60 se celebraban corsos barriales, pero ahora con abundante testimonio de los vecinos.
Dudosamente –y sin querer faltarles el respeto- ninguno de ellos jamás hubiera intentado comprobar la real y concreta existencia del amenazante cuchillo en la paja de la escoba. Los tres son hombres de buena familia, trabajadores y poco adeptos a intercambiar con la "runfla" del barrio, que era justamente la que formaría esa murga. Pero sí podemos aseverar que sus historias y relatos son las de un barrio que ha sabido crear, mediante retazos de oscuras y viejas culturas ajenas, sus propias leyendas, sus propios rituales y sus propios misterios.
Tal cual lo han hecho todas la sociedades del mundo, desde siempre.




TITO CONTI ENTREVISTADO POR NINO VOLPE




viernes, 15 de octubre de 2010

INSTANTANEAS DEL CARNAVAL 2010 (IV)






Dice Mónica Wiros de Los Imparables de Paternal: “Los noticieros y diarios nos anunciaron. ¡Vamos por eso! ¡Qué empiecen con toda la fuerza en esta noche de carnaval. La magia, la ilusión y las sonrisas llenarán cada rincón de Capital Federal y las Provincias. Un abrazote para antes de salir a escena. ¡VIVA LA MURGA, LA EXPRESION CALLEJERA, POR LA LIBERTAD DE PODER DAR ALEGRIA!




ARRANCARON LOS CARNAVALES PRISIONEROS 2010

Por Alfredo Armando Aguirre

Bueno, vamos a dejar de lado, eso de que no tenemos abuela y vamos a intentar dar un pantallazo, en medio de la saludable resaca de este último fin de semana, en el que Los Prisioneros del Delirio comenzaron estas carnestolendas 2010, donde celebran (celebramos dijo el mosquito) diez años de existencia. Y se desplegó en la Avenida Roca, frente al Club José de San Martín, en Sarandí, cerca del Viaducto y del estadio del Arsenal F.C. todo el potencial prisionero en los corsos, que compartió con otras seis murgas, a raíz de dos por noche, sumándose el cierre a cargo del murgon anfitrión.

El sábado nos acompañaron Estrellas Murgueras de Francisco Álvarez, Los Pegotes de Florida, Zapatillas de Lona de José Mármol. El domingo actuaron Los Pitucos de Villa del Parque y Devoto, Me Caigo y me Levanto del Barrio INFICO de San Fernando y Espíritu Cascabelero de Lanús. No tengo tiempo de hacer un comentario de cada actuación pero en el ambiente murguero se descuenta que todos dan lo mejor de sí.

Sí vamos a dar algunos detalles de lo mostrado por los locales, que prepararon meticulosamente este espectáculo, con el que celebramos nuestros primeros diez años de vida. Aunque parezca obvio decirlo se trabajó todo el año en el armado del espectáculo. Letras, músicas, percu, coreo, glosas. Aun así, hubo sorpresas muy singulares porque algunos grupos o miembros individualmente fueron preparando sorpresas, de las que el resto se iba enterando al momento de comenzar el corso. Ya no era sorpresa que se había incorporado un bandoneón e instrumentos de percusión africanos. Tampoco que estrenábamos equipo de sonido nuevo. Tampoco que se confeccionaban una veintena de banderas y un banderón con los colores violeta, turquesa y verde que identifica al murgón.

Pero las sorpresas se iban sumando: Las "artesanas" prisioneras habían confeccionado unos primorosos souvenires que tenían una galerita y dos manitas enguantadas en blanco, casi como un LOGO de los 10 años prisioneros. Las mamás, que dieron mucho soporte, aparecieron con unas camisetas blancas con el muñequito del estandarte prisionero y la leyenda MAMA. Los padres tenían la misma camiseta pero sin decir PAPA. Uno de los de la percu, con ayuda de su mamá artista plástica, confeccionó una galera con forma de torta de cumpleaños con el numero diez con velitas y todo. La lució a la galera el más veterano del murgón. Nuestras artistas confeccionaron un escenario con mucho primor. Eso dio marco al espectáculo que disfrutaron los vecinos y las murgas visitantes.

Un bache en la llegada de uno de los murgones dio pie al despliegue de la capacidad creativa prisionera que con los inefables Fabi y Goñi, armaron un espectáculo de fono mímica que "degeneró" en bailanta, con fans y todo. La gente se prendió. El día anterior un curioso episodio dio lugar a un "gag", que si se hubiera guionado no hubiera salido tan bien. Resulta que una señora se acerca al palco diciendo que se había perdido a su hija. Uno de los del palco le preguntó cómo se llamaba. La señora dijo el nombre. Después le preguntó cuantos años tenia y la mamá dijo: DIECISEIS. Desde el palco la atajaron y todos festejamos la situación por demás irrisoria.

Hay mucho más, sólo queremos agregar que repetiremos corsos el 20 y 21, esperando no tener lluvias inoportunas. Antes y después de esas fechas, el murgón de Sarandí hará su espectáculo por los corsos amigos donde ha sido convocado.

Aunque nos cuajen lo que se conoce como generales de la ley, los invitamos a vernos. Este espectáculo del décimo aniversario prisionero tiene muchísima miga. No queremos finalizar esta suscinta crónica, escrita a vuela pluma, sin consignar que hubo alguien que seguramente experimentó emociones de las fuertes, entre los presentes en el corso del domingo: La joven Profesora Romina Mónaco. Ella, veinte años recien cumplidos, en el marco de un taller de murga que brindara en el hoy inexistente centro Pizarnik, generó las condiciones para el nacimiento del murgón. Ese murgón que todavía integran Walter, Juancito, Pablo, May, Gery, Claudio y alguno otro u otra más que en este emocionado momento el alemán me impide recordar…
Buenos Aires lunes, 08 de febrero de 2010



Comenta Gra La Torda del Centro Murga Los Pitucos de Villa del Parque y Devoto: "Agrego al relato de Alfredo "Prisionero" que además estaban las barredoras, con sus escobillones, limpiando la calle del corso. ¡¡¡Hermosas!!! Contá un poco de eso. La pasamos muy bien en el corso... Y los choripanes ¡¡¡de lo mejor!!!"





Responde Alfredo:"DE CHORIPANES Y "BARRENDERAS" EN SARANDI. Escribimos esto a raíz del mensaje de la "Torda" pituca. Recordamos que escribimos la minicrónica de los corsos prisioneros de Sarandí del último fin de semana, aclarando que lo hacíamos con la resaca, con mucho sueño y bueno…como se dice por Barcelona, "Nadie sabe mas que el colectivo"; y ante la sugerencia de la "Torda", cuento que la calidad de los choripanes obedece a que son manufacturados por el "Chepi", un ya veterano percusionista de la murga, que en otros carnavales encarnó a un inefable predicador que remataba las bendiciones. El Chepi se esmera con los chorizos que hace: No se vayan a creer que los hace igual para los clientes… (En los nuestros asegura que ningún gatito y pichicho va incluido…). Respecto a las barrenderas, atracción para la chiquillada, fueron protagonizadas por el Goñi, Gaby y la mascota todoterreno "Axel". Tanto Gaby como el Goñi, anduvieron por Suardi, donde han aparecido las barrenderas. Claro que allí eran chicas. Aquí estos dos -uno mas histrión que el otro- se disfrazaron de tales he hicieron de las suyas. Cabe recordar que Gaby (que está casi desde el principio en el murgón del viaducto) hace una memorable imitación de Sabina en una canción y otro memorable eructo como borracho… En fin, los corsos dieron para todo el despliegue del entusiasmo prisionero en su décimo aniversario. Así que si les dan los horarios, recordamos que los repetiremos el 20 y 21 de febrero. Antes y después nos presentaremos en distintos escenario del conurbano, donde nos han invitados murgas e instituciones amigas."

Expresa Miguel Middonno: "Aquí comparto algunas fotos de la maravillosa noche del jueves en el anfiteatro del Parque Centenario, con las presentaciones de Los Quitapenas y Agarrate Catalina. Ojalá que estas imágenes aporten un último cosquilleo a las sensaciones de quienes estuvieron presentes (arriba y abajo del escenario). Y que por un momento, también se conviertan en ojos de los que no pudieron asistir."





“Miguel”, dice Sole del Carril de la murga Los Quitapenas, “¡¡¡Qué buenas fotos!!! Me alegro de que lo hayas disfrutado. Para nosotros fue un hermoso honor y una gran responsabilidad acompañar a tan impresionante murga uruguaya y ¡¡para tanta gente!! Todavía no salgo de mi alegría y asombro de cómo respondió la gente. Aprovecho a agradecer por la magia generada porque es tan importante lo que pasa arriba como lo que abajo sucede. Sin esa combinación, no se enciende nada. ¡¡A todas las murgas del país, les deseo un muy feliz carnaval!!


Un corso de los que no hay


Por Diego Robacio

Les quiero contar de un corso muy lindo que ayer sábado nos tocó disfrutar con Gambeteando. Me refiero al corso independiente de Villa Pueyrredón, organizado por la murga Los Pibes de la Esquina de Villa Pueyrredón, si no me equivoco, junto a Los Soñadores de Villa Pueyrredón y los vecinos.


El lugar, ¡diez puntos! Sin casas cerca como para no molestar a los vecinos, con una calle ideal para el desfile; un parque donde podían jugar los chicos y hasta un estacionamiento gratuito para los que se arrimaban en coche. La infraestructura, que es tan importante para que los vecinos disfruten y la murga se luzca, también estuvo diez puntos. (Sólo les falta mejorar la escalera para subir al escenario.) Este último, amplio y alto para que todos vean bien, buen sonido (yo sumaría un quinto micrófono), una buena parrilla de luces y ¡¡¡hasta humo!!! para que todo luzca.

Bebederos, bidones de agua para las murgas e incluso los tan indispensables baños químicos y y algunos ingredientes impagables que es difícil encontrar: ¡había papel picado! Vecinos con sillas y reposeras, vecinos haciendo picnic en el parque ¡y no había vallas!, cosa que de ninguna manera entorpecía el baile de los murgueros porque la gente respetaba el espacio;concurso de disfraces en el escenario.

Todo esto junto generaba una onda bárbara. Ayer mientras nosotros estuvimos pasaron todas murgas del circuito: Los Mocosos de Linieres, Los Iluminados de Urquiza, Gambeteando el Empedrado y Endiablados de Villa Ortúzar (que nos hicieron la gamba bailando un tema con nosotros). Un verdadero ejemplo de fiesta carnavalera.


Una movida que respira febrero durante todo el año
Por Miguel Middonno

Desde hoy habrá 33 corsos en los barrios, con desfiles todos los fines de semana del mes. Las murgas, grupos musicales, bailes y disfraces aportarán una cuota de color.Los corsos del fin de semana

Con su querible combinación de melodías pegadizas y levitas multicolores, las murgas porteñas buscan seducir al calendario con un eterno febrero. Es que además de renovar en los corsos de carnaval el indestructible romance con el empedrado, buena parte de las agrupaciones realiza presentaciones durante todo el año, por medio de espectáculos propios, ciclos temáticos y la tradicional presencia en las celebraciones populares de cada barrio.

Uno de los eventos que le puso ritmo de bombo y platillo al invierno porteño se realizó en el Parque Avellaneda, un espacio modelo en la Ciudad por su riquísima actividad cultural. En dos etapas - junio y setiembre- más de 50 murgas mostraron su arte en el Antiguo Tambo, una coqueta sala que también abrió su escenario a conjuntos de estilo uruguayo, grupos de percusión, bandas de rock y hasta una exposición de fileteado porteño.

La respuesta del público superó todas las expectativas. "Demostramos que se puede disfrutar el espacio público desde adentro, sin disturbios y a partir de la solidaridad", resumió Gabriel Figu Roel, de Los Descarrilados de Parque Avellaneda, la murga organizadora. Pero fiel a una historia que conoce de sacrificios anónimos, silencios que se parecen a obstáculos y realidades que otros atribuirían sólo a un milagro, el ciclo aún no tiene confirmada su realización en 2010. "Soñamos con encontrarnos de nuevo en un espacio que supimos ganar entre todos", agrega.


El Antiguo Tambo del Parque Avellaneda también fue cómplice del baile divertido de Rubén Carballo, el chico de 17 años que murió tras una salvaje represión policial en el show de Viejas Locas. Regaló alegría junto a su murga, Mata Mufa de Ramos Mejía, a cambio de una colección de sonrisas transformadas ahora en un interminable grito de justicia.


Las murgas también se sumaron a la interminable cartelera de espectáculos que ofrece el centro. A pocos metros de la Avenida de Mayo, el bar Los Porteñitos derrochó carnaval durante buena parte de 2009, con un ciclo que incluyó -los jueves por la noche- las presentaciones de Los Mocosos de Liniers, Los Reyes del Movimiento (Saavedra), Espíritu Cascabelero (Lanús) y Los Pegotes de Florida, entre otras agrupaciones de primer nivel. Y el Centro Cultural Ricardo Rojas, dependiente de la UBA, volvió a ser escenario de talleres artísticos que ya son un clásico de la cultura de carnaval en la Ciudad.


Con los recuerdos de febrero dejándole paso a los sueños del próximo carnaval, Los Inevitables de Flores exhibieron durante junio toda la inteligencia de su escenario, con un ciclo propio en Palermo. Y en noviembre, Herederos de la Locura (Bajo Flores) llevó su combinación de murga, compromiso social y teatro callejero al Parque Avellaneda.


El cierre de 2009 dejó, como si fuera un regalo anticipado de carnaval, dos eventos que prometen continuidad durante el año. Para reafirmar un eterno ida y vuelta entre tango y murga, cinco agrupaciones se presentaron en el legendario club Sin Rumbo de Villa Urquiza, uno de las catedrales del dos por cuatro. Y días antes del brindis de año nuevo, La Flor y Nata celebró sus diez años con una emotiva actuación en el remodelado anfiteatro del Parque Centenario. Como para ratificar que las murgas, declaradas patrimonio cultural porteño en 1997, tiene mucho para mostrar en los principales escenarios de la Ciudad.


Escribe Joana de Los Murginales de Amberes, Bélgica: “¡La murga belga se acerca! El 12 de febrero estaremos en Buenos Aires. Ya empiezan, ya se siente, ya casi está empezando a sonar la percu, la última puntada al traje, las pinturas preparadas, los guantes bien blancos, ya casi está por volver a reinar, como todos los años, la alegría, los multicolores, las canciones las ganas de bailar. El Rey momo casi esta aquí y le hará desafio al tiempo como todos los años y ganará. Brillen todas las murgas. Salgan con emoción. Todos estamos esperando esas noches de ilusión. ¡Qué siga la función! ¡Feliz carnaval para todos! ¡Hasta la murga!


Esta es la contribución de Maxi Catalano de la murga Pateando Contra el Viento de Zapala, Neuquén: "A pesar de las idas y vueltas, ensayos a mil, decidiendo si decidimos hacer un baile u otro, implementar ritmos a una semana del carnaval, a ensayar todo a las apuradas, entre que pongo una lentejuela por acá, una mostacilla por allá, ¡qué no llego con los apliques!, ¡qué tengo que estudiar!, de por medio estan los viajes, que no salimos la primer noche de corso por problemas de financiación, que se arma discusión, que nosotros nos dedicamos a nosotros, ¿qué pasa al final? ¡¡¡Salimos de carnaval!!! Tuvimos la mala racha de empezar el carnaval algo tarde pero al final salimos tres fin de semanas de corso en corso, arrancando por Cutral-Co, más allá que fue sólo un día y la gente se amontonó en la calle; que algunos por darle el lugar a otros integrantes se garparon el viaje hasta ahí, aún así salimos, que fue lo más importante y la gente nos siguió y se alegró de ver a la naranja y negro zapalera en la noche. ¡El corazón inflado y alegre de poder decir: salimos! Es difícil de explicar pero la puesta en escena de la murga al menos una vez en carnaval te llena como cada noche que siguió. Al volver esperamos ansiosos una semana y a muchos se les mezcló su vida como estudiantes con las de murguero. Por un lado se venía el corso más grande. Por ser locales todos se podían prender. Hubo quienes aparecieron con confianza y a quienes no les dio y les bastó con mirar al murgón que creció de manera descomunal. Esto lo digo con sinceridad: Sólo paré un instante a mirar y todos los bailarines en el aire, las banderas agitandose y todo ese brillo y alegría en cada cara que iba detrás del nuevo estandarte, me puso la piel de gallina y decir ¡qué lindo es hacer esto! Sin parar, el espíritu brotaba en mí todas las emociones en cada paso. Salto, patada y el bombo que me demandaba bailar... Una noche perfecta. ¡Ojo! Hablo del viernes. El sábado nos cortaron el mambo porque se presentó una banda de cumbia. Denuncio esto públicamente porque estuvo mal la actitud tomada. Quedaba la última noche, muchos tristes y ansiosos actuamos en la única oportunidad que quedaba de salir en carnaval. Lo despedimos en Mariano Moreno, un corso más tradicional en su estilo y, en mi opinión, uno de los mejores. No es por lo que pasó, que fue lo que puso una sonrisa en cada naranja y negro y quienes estaban para hacerle el aguante. Hablo de que la gente de Moreno eligió a nuestra murga como la mejor de ete año. Sé que no eran muchos elencos los que participaban pero nos llenó el alma el humilde reconocimiento que nos dieron. ¡Ahora ansioso a esperar hasta el próximo febrero! Espero que nos volvamos a ver. Pateando tocó el corazón de cada uno que se puso una levita de su color. ¡Hasta el próximo carnaval!"





Villa Manuelita No se Rinde. Saavedra tampoco.

Por Pupita La Mocuda

La historia de Villa Manuelita, en el sur de Rosario y allá por los años cincuenta, quedó grabada para siempre en mi memoria desde el momento en que la conocí. "¡Villa Manuelita no se rinde!", dicen que gritaban sus pobladores. Saavedra tampoco.
Es que ayer (hace un par de horas no más, ahora es de madrugada) el barrio de Saavedra tuvo su corso. Fue uno de los únicos tres que se realizaron en la Ciudad de Buenos Aires aun cuando su gobierno decidiera que no habría celebraciones de carnaval para este sábado que pasó.
Al rato de comenzado, la gente encargada de la organización avisaba por micrófono a la nutrida concurrencia que el haber decidido llevarlo a cabo podría traer acarreada una sanción que prohibiría su realización durante el próximo y último fin de semana de febrero y que a un costado del escenario se estaban juntando firmas para solicitar que esto no ocurriera. La gente hacía fila para listar su nombre en contra de la prometida reprimenda. "¡¡¡Vamos Saavedra!!!" gritaba emocionada una señora que se aferraba a una de las vallas de contención.
Y fue así que hora tras hora, choripán tras choripán y tubo de espuma tras tubo de espuma pero sin lluvia, las murgas que iban entrando una detrás de otra sin respiro, desplegando toda su multitudinaria hermosura, conscientes desde la palabra de su rol de sostén histórico del carnaval porteño, cuidadosas hasta lo más mínimo del horario y solidarias con las que venían detrás, llenaron la noche de brillo y de talento carnavalero engalanando la antigua Avenida del Tejar, hoy Ricardo Balbín y arrancando sonrisas y aplausos a rabiar.
Se presentaron Los Eléctricos de Agronomía, Los Duques del Empedrado, Los Soñadores de Villa Pueyrredón, Enviciados por Saavedra, Los Cometas de Boedo, Los Goyeneches de Saavedra, Sacate la Pachorra de Berazategui y Los Reyes del Movimiento de Saavedra dieron todo lo mejor de sí para que la celebración tuviera lugar. Destacada, una murguerita vestida con el traje de Los Magos de Saavedra que bailó junto a los demás niños de todas las otras murgas que iban llegando.
Una verdadera fiesta de la cultura popular con murgueras y murgueros que supieron poner sobre las maderas del escenario y sobre el asfalto sus corazones, sus vidas enteras, sus anhelos, sus alegrías, sus tristezas, sus enojos, su autenticidad a flor de piel. Habría muchísimo más para contar... ¡Gracias a todos ellos por una noche maravillosa! ¡Viva el carnaval!
Domingo 21 de febrero de 2010











"¡Sí, señor! ¡Aguante Saavedra!", dice Osvaldo Battipaglia de Los Dandys de Boedo.




Cuenta Diego Robacio de Gambeteando el Empedrado: “También se hicieron en la Avenida Independencia y en la calle Lambaré y otros querían hacerlo pero no fueron a conectarles la luz y por eso no pudieron llevarlos adelante. Y, por sobre todo, como argumento de defensa para los corsos que se hicieron y para testimoniar que la medida generalizada hacia todos los corsos fue injusta (sí se entendía los que estaban en cuadras que todavía tenían problemas graves por la tormenta) el Gobierno de la Ciudad hizo un evento a todo trapo al aire libre en el Obelisco.”

Francisco Frulla de Los Habitués escribe: “Quiero contarles que también se hizo el corso de la arpillera. Pese a todo, Cachengue le puso fiesta a la Triple Frontera. La tarde arrancaba complicada con la constante amenaza de un cielo gris y algún que otro rayo pero los compañeros de Cachengue y las murgas que allí nos presentamos decidimos hacerle frente al mal TIEMPO y decidir nosotros cuál sería el CLIMA de la noche. Quiero resaltar, a mi parecer, algo muy importante que sucedió ayer. Antes de que Los Habitués saliéramos, los organizadores nos consultan si teníamos problema en esperar un rato para salir ya que se habían comunicado con ellos Los Atrevidos por Costumbre y que, debido a que los corsos OFICIALES se habían suspendido, pedían permiso para presentarse en el corso ya que estaban subidos al micro sin tener lugar donde actuar. Y así fue no más que nosotros accedimos y Atrevidos pudo brillar en ese hermoso corso INDEPENDIENTE que organizan los amigos de arpillera. Luego nos presentamos Los Habitués sin sonido (por el riesgo eléctrico) y bajo la lluvia que, debido a que la espera fue larga, volvió a amenazar con aguarnos la noche. Lejos de lograrlo nos puso más energías y más ganas de divertirnos y así fue como todos nos quedamos a presenciar la ¡I-N-C-R-E-I-B-L-E ! actuación de CACHENGUE Y SUDOR. Murga: ¡gracias por otra hermosa noche de carnaval!


Relata Miguel Middonno: “Maravillas del carnaval porteño; sentidos a puro vértigo bajo la llovizna y la certeza de un pacto indestructible con la gente. Anoche, pese al tiempo, los cortes de luz e inconvenientes de último momento, Floresta tuvo su corso independiente, organizado por la murga Mala Yunta. Con la ofrenda de Los Descarrilados de Parque Avellaneda, Sacate la Pachorra de Berazategui, Los Plebeyos de Villa Devoto y Rescatalegría de Villa Luro. Con vecinos unidos para el aporte de energía. Y un centro cultural -público- que se animó a ponerle sonido al canto murguero. Tuve la oportunidad de compartir, desde el Parque Avellaneda, la caminata haciael corso junto a Los Descarrilados. Un viaje dominado por la alegría de saberque, pese a todos los contratiempos, igual había actuación. En el camino,cuadras dominadas por las sombras y vecinos en las puertas; una dolorosa combinación que estallaba de bronca en los cruces de avenidas. Y en medio de ese viaje, cómplice y constante, una pregunta ansiosa que asomaba entre la oscuridad de los rostros para llenar de luz el alma... ¿chicos, esta noche igual se hace el corso?”


Daniel Gustavo Sánchez de Los Chiflados de Almagro agrega: “Ayer, cuando me dijeron que mi murga no salía por culpa de la suspensión de los corsos, me fui a mi casa y me enteré de que en mi barrio, Saavedra, el corso se hacía. Dije: ¡bueno me voy a sacar la bronca viendo las murgas en el barrio! Ahí viene la segunda bronca del día. Este hijo de puta no conforme con suspender los corsos me vengo a enterar que quiere sancionar al corso de Saavedra. Entre medio de esto llego a mi casa y prendo la televisión y veo que en el Obelisco hacían el Festival de Tango que tuvo ocho mil personas, según los medios. Esa cantidad de personas se juntan en tres o cuatro corsos de un solo día de carnaval pero, claro, parece que lo que nosotros hacemos no es cultura.”


Enrique Molina aporta: “Les informo que ayer hubo corso en Villa Urquiza a pesar de las amenazas de sanciones y el barrio tuvo el privilegio de ver a Los Enviciados, Los Cometas y Los Reyes del Movimiento, dando un espectáculo de enorme calidad artística. El público de nuestro barrio y Los Fantoches estamos muy agradecidos a estos tres Centros Murga que dieron cátedra de murga porteña. También el Club California (tradicional escenario murguero) se llenó de público y de murgas, como hacía años que no sucedía.”





Nico Barba de Cachengue y Sudor añade: “Los corsos de Cachengue se hicieron los dos días y fueron una gran fiesta.”


“También se hizo el corso del Colo de los Pibes de la Esquina en la estación de Villa Pueyrredón y en el club California en Villa Urquiza.” señala, Fiorella, la Gitana de los Endiablados.


Escriben Ana Risso y Los Reyes de Billinghurst: "Un enorme agradecimeinto a las murgas que llegaron hasta nuestra plaza el día 6 de marzo: Los Eléctricos de Agronomía, Poseídos por Momo de Caseros y Los Lunáticos de Caseros, hermosa presentación y luego rejunte murguero. Muy buena onda trajeron y enormes ganas e murguear todos juntos; todo muy sencillo y en un clima de verdadera amistad."

Se suma Víctor Risso de Los Que Quedamos de Ituzaingó: "Bueno, para nosotros estar viviendo estos 3650 días junto a Momo de esta manera es el paraíso. Anduvimos por Capital Federal, por las Zonas Sur, Norte y Oeste del Gran Buenos Aires. Ahora terminamos esta etapa de carnaval y desde junio volveremos para seguir festejando estos diez años en los barrios. 20 PRESENTACIONES BARRIALES; 800 KM RECORRIDOS; 16 BARRIOS NOS VIERON; 10.000 VECINOS PUDIERON VER NUESTRO SHOW DE 10 AÑOS JUNTO A MOMO."

Este es el aporte de Pichi Roterio de Los Caprichosos de San Telmo: “Primero que nada saludar a Los Revoltosos de Saavedra que en su primer corso en un barrio relativamente "lejos" del centro juntaron un montón de gente, máxime que es un pueblo acostumbrados a las comparsas. AYER EMPEZARON HACER HISTORIA. Seguramente en un par de años el corso de ustedes será más que multitudinario. Por otra parte quería contarles ¡lo lindo que fue! No sé cómo pero se las arreglaron para llenar el lugar de gente disfrazada. Había para todos los gustos y se notaba que eran vecinos. En ningún corso de la Capital vi ni el diez por ciento de disfrazados que anoche había ahí. ¡Muy bueno! Abrió la murga de Bragado Los Mismos de Siempre. Siguió La Yunta Brava de Chivilcoy. ¡Muy buena! Esta murga tiene una presentación espectacular; muy bien vestida y sus fantasías excelentes. Continuamos nosotros que no anduvimos lo bien que nos hubiera gustado. Siguieron Murgueros por Siempre de Castelar con un escenario cada día mejor y cerraron el desfile de murgas los locales Revoltosos de Saavedra que, en su noche de gloria, estuvieron a la altura de las circustancias. MUY BIEN. El corso terminó con un baile popular animado por un grupo de cumbia local que se llama El Capricho Colombiano, quienes demostraron que se puede hacer buena cumbia y hacer bailar hasta los muertos. A pesar de que la noche se ponía más que fresca, la concurrencia aguantó hasta el final. A la una y media de la mañana emprendimos el regreso, cansados pero contentísimos, y esperando vernos pronto. Gracias Revoltosos y Desquiciados.”

Cuenta Gaby Campo: "Hace un par de años que dejé por un tiempo
el ensayo fotográfico sobre murgas, pero el sábado desde mi casa escuchaba los bombos a lo lejos y no me pude resistir y fui a ver que
salía y quedó esto de la presentación de Los Pitucos en el corso Paternal I."










Dice Javier Matarrese: "Quiero compartir con ustedes una serie de fotos hecha el Sábado pasado durante la presentación de los mugueros belgas y La Matraca en el Centro Cultural Ricardo Rojas."







Dice Malau de Los Viciosos de Almagro: "¡Feliz carnaval" Humildemente, amo ami murga desde los bombos hasta los que cantan, los que bailan y sacan fotos, el payaso y las mascotas... Se siente un sentimiento... Observá con atención cuando aplaude la gente. Decime, ¿no se te pone la piel de pollo? ¡La pucha! ¡Ojalá te pase! Por ahí te pasa lo mismo... Aquí la crítica que cada día sale mejor porque le agregan algo... ¡Cómo se ríe la gente! ¡Qué bueno!"











Opina Ana Risso: “Lo importante que hagamos muchos festivales, corsos, salidas como lo llamemos; los bombos de nuestras murga se unirán en el espacio. En cada patada murguera, en cada sonrisa de la gente, estaremos unidos. Lo importante es Murguear.”

Miguel Middonno comunica: “Escribo para compartir esta satisfacción con vos y todos los que construyen ¡Dale Murga! Hace un rato se publicó en Clarín un foto-reportaje que hice sobre las salidas de carnaval de Los Descarrilados de Parque Avellaneda. Maravillas del carnaval; redacto estas líneas desde Dolores, provincia de Buenos Aires, una ciudad que vibra con una nueva edición de su Fiesta de la Guitarra. Al oeste, las nubes quieren robarse el atardecer; una pelea eterna que en el campo se disputa a la vista de todos. Y sin embargo, mis sentidos siguen dominados por las levitas multicolores y el hipnótico ritmo del bombo con platillo.”

Murguita querida

Con su ofrenda de sacrificios anónimos, más de cien agrupaciones renuevan cada febrero el mágico romance entre barrio y carnaval. Junto a Los Descarrilados de Parque Avellaneda, un viaje a los arrabales de un mundo que respira nostalgias y, también, sueños repletos de futuro.

Por: Miguel Middonno






En Buenos Aires, unidos triunfaremos

Por Sebastián Linares para Fractura Expuesta



“Las dos orillas del río de la Plata” es una de las formas utilizadas para describir a la región geográfico–cultural llamada rioplatense. Región que une aquello separado por la historia, en lo que hoy es parte de Argentina y Uruguay. Y “Murga de las dos orillas” fue el título de un espectáculo que mostró, en pie de igualdad, las distintas formas que tuvo la murga en cada una de las riveras.

Formas y caminos muy particulares que hicieron que la murga uruguaya y la murga porteña sean dos géneros diferentes no solo en lo formal sino también en la legitimidad disfrutada en sus propios países. La uruguaya, desde hace décadas parte del folclore oficial, valorada como expresión artística, mucho más profesionalizada y con una circulación que atraviesa tanto clases sociales como escenarios destacados. Y la murga porteña, más ligada a los sectores populares, con todo lo que ello implica en cuanto a producción, circulación y difusión, lo que la alejó hasta hace poco de cierta “lista oficial” de las expresiones folclóricas de la ciudad. Eso hizo que la murga porteña, entre la ignorancia y la incomprensión, todavía hoy siga peleando por un lugar bajo el sol del espectro legitimado de la cultura.

Por lo antedicho, que el espectáculo “Murga de las dos orillas”, además de gratuito, se haya realizado en un escenario estatal tan importante como lo es el auditorio Eva Perón del Parque Centenario, ya era una novedad. No tanto por la presencia de la archiconocida murga uruguaya Agarrate Catalina sino por la murga de estilo porteño Los Quitapenas, la otra propuesta de la noche. Es que, paradojas de la esquizofrenia argenta, ante un público mayoritario de clase media, los uruguayos jugaban de locales y los porteños… de visitantes.

Formada en 1990 en el “Taller sobre murgas, comparsas y agrupaciones humorísticas” dictado en el Centro Cultural Ricardo Rojas, Los Quitapenas es considerada una de las primeras “murgas de taller”, lo que conlleva otra forma de aprender el género, más formalizada y alejada de los núcleos barriales. En ese ámbito de origen, se fue conformando su particular mixtura de murga porteña con el teatro y sus códigos escénicos que derivó en un verdadero camino de indagación artística. En 1993, corridos ya del paraguas institucional del Rojas, fueron muchos los espectáculos que realizaron en corsos y escenarios. Murga símbolo de la irrupción de la clase media en el género, fue uno de los motores en las marchas por la restitución del feriado nacional del carnaval. También fue rescatista del legado de los viejos murgueros de la década del cuarenta, que culminó en el bello disco “Con el corazón en juego” (1999), un emotivo viaje a la historia de la murga porteña de la mano de sus protagonistas.

Con motivo de cumplir 20 años de existencia, Los Quitapenas acaban de editar su disco “Febreros”, con canciones de los últimos cinco años y estrenaron su obra “Viajeros, peripecias de una murga llegando al bicentenario”. Estreno que iba a ser en algún corso del carnaval pero que, diluvios varios mediante, se concreto en la noche del Parque Centenario.

Ante un público expectante que en su mayoría no los conocía, Los Quitapenas irrumpieron en el escenario con una demoledora entrada de desfile murguero. Irrupción poderosísima que desde el comienzo arrancó gritos y palmas a más de un sorprendido por el baile colorido y endemoniado que se fue desplegando a lo ancho del escenario. Pero la espectacularidad de su “estilo porteño” no evitó que todo estuviera sujeto a una cuidada coreografía, donde cada hilera hacía un movimiento diferente y complementario de la otra. Un comienzo “tradicional” interrumpido por una dramatización donde, a partir de la aparición en escena de una máquina del tiempo, se iba a ir produciendo un interesante contrapunto entre la historia de la murga y la más reciente de la Argentina. Contrapunto acertado para el público heterogéneo de los espectáculos murgueros que permitió el disfrute de niños y adultos por igual.

Lo actuado se alternó con canciones, interpretadas por un coro de espectro tonal amplio, diferente a los coros más tradicionales del carnaval porteño. Pero, siempre en la búsqueda del equilibrio, lo armonioso de las voces se acompaño por una contundente base de bombos con platillo, redoblantes y el tanguerísimo sonido de un bandoneón.

Con una mezcla permanente de lenguajes expresivos, la propuesta de Los Quitapenas (y de este espectáculo en particular) es una excelente puerta de acceso para quienes todavía no conocen al género local de la murga. Y un verdadero aire fresco para aquellos seguidores ávidos de innovaciones artísticas que buscan la renovación de la murga sin salirse de ella. La prueba fue la ovación general que despidió a esta agrupación que salió a ganarse un público que, en su mayoría, no la conocía. Con creces, lo terminó logrando.

En cuanto a Agarrate Catalina, la presentación fue una síntesis de los espectáculos de los últimos cinco años. Es que esta murga multipremiada -ya desde sus comienzos en el 2001- fue una verdadera renovación en el género oriental. Sus seguidores locales lo saben y para ellos fue un regalo poder ver partes de los espectáculos presentados en distintos carnavales como “Los sueños”, “El fin del mundo”, “El corso del ser humano”, “El viaje” y una parte de la obra de este año, “Civilización”.

Dirigida por Tabaré Cardozo, lo de “la Catalina” es un ida y vuelta de humor ácido e inteligente, increpador de sentidos comunes. Con diálogos afilados y canciones ejecutadas por un coro increíble, la andanada argumental demandó del público una atención permanente, en una presentación dinámica donde se iban sucediendo cambios de vestuario a medida que el derrotero del espectáculo avanzaba. Comentario aparte merece el platillero del grupo quien, además de excelente músico, terminó siendo un verdadero showman que hizo malabares con su instrumento.

En el final, caracterizados como indios charrúas, presentaron una parte de “Civilización”, obra que están presentando en el carnaval montevideano de este año. Verdadera parodia a la historia oficial del Uruguay, los diálogos feroces fueron perfilando el interrogante sobre el ser uruguayo de una manera ácida y descarnada, que en su país de origen está dando que hablar.

El cierre de la noche fue una verdadera fiesta rioplatense ya que en la última canción de Agarrate Catalina, entraron en escena Los Quitapenas metiendo pasos de murga porteña sobre la musicalidad uruguaya. Un verdadero carnaval que fue sumando al público en un desfile de retirada que bajó del escenario y bordeó el anfiteatro en una despedida sin fin.

En el contexto local, la fuerte recepción que tuvo “la Catalina” fue previsible. Es una de las murgas más reconocidas dentro y fuera de su país y justificativos no le faltan. En cambio la ovación recibida por Los Quitapenas fue inesperada. No porque les falte calidad artística –que la tienen y mucho- sino por ese plus que significa tener que luchar contra los prejuicios sufridos aquí por el género porteño del carnaval. Para ellos, la ovación recibida valió doble, como también fue doble el mérito por demostrar - ¡una vez más! - que la murga porteña es un género artístico tan legítimo como el tango y el rock. Pero con sus particularidades, lo que implica conocerlo y respetarlo. Sin embargo, la ignorancia estatal y privada hacia el carnaval de Buenos Aires no ayuda a cambiar esa realidad y eventos como éste, a todas luces aplaudibles, son todavía excepcionales. Mientras tanto, si en algún corso ven una murga violeta y naranja saltando sobre el empedrado, no duden en acercarse, son Los Quitapenas bailando en carnaval.

CRONICAS DE UN FIN DE SEMANA CON REPRESIONES Y PROHIBICIONES EN VICENTE LOPEZ

Por La Coca de el Centro Murga Los Pegotes de Florida

El sábado 27 de febrero el Ateneo Santa Rosa y el Centro Murga Los Pegotes de Florida organizamos un festival de carnaval en la calle Santa Rosa, entre Avenida Maipú y 25 de Mayo, Vicente López, para el cual contábamos con el permiso correspondiente; sin embargo, sin mediar explicación alguna el permiso fue revocado pocas horas antes que diese comienzo nuestro festival. No nos sorprende la actitud patotera y autoritaria del "Japonés" García, ya que es una constante la persecución a toda expresión cultural que no sea organizada por el intendente o alguno de sus amigos.

Nuestra murga cuenta con un largo historial de persecuciones, prohibiciones y acosos de todo tipo por el solo hecho de pretender ser independiente, situación que padecen otros colectivos sociales y culturales, artesanos y artistas callejeros. Los Pegotes cumplimos ochenta y seis años de trayectoria, y como murga independiente con mucho esfuerzo nos preparamos durante todo el año y salimos en muchos corsos de la Provincia de Buenos Aires y de Capital Federal pero aquí en Vicente López no nos permiten hacerlo. Igualmente el sábado a las 19 hs, nos reunimos en el lugar del festival prohibido con nuestros trajes y bombos, donde a pesar de la presencia de dos móviles policiales, armamos un festejo de dos horas, repartiendo volantes a l@s vecin@s.

El viernes 26, también había sido prohibido un festival carnavalero donde vecinos de Villa Martelli y Florida - también Los Pegotes - acordamos en juntarnos en la plaza de la estación Padilla a bailar y disfrazarnos para festejar el carnaval. Para esto consensuamos un horario de 20 a 24 horas, poner un equipo de música y presentar una nota a la municipalidad informándole del festejo vecinal y pidiéndole el uso de la electricidad y la instalación de baños químicos. Los vecinos estuvimos toda la semana preparando disfraces, sobre todo para las niñas y niños, adornos para decorar la plaza y bolsas para limpiar al finalizar el festejo. La municipalidad decidió no autorizar el baile cercando toda la plaza con cintas de PELIGRO y veinte policías afectados al operativo. ESPERAMOS EL APOYO DE TOD@S L@S MURGUER@S PARA LAS PROXIMAS ACCIONES QUE REALICEMOS JUNTO CON L@S VECIN@S. ¡¡QUE VIVA EL CARNAVAL!!



DERECHOS CARNAVALEROS PARA POCOS
REPRESION EN VILLA LIBERTADOR


Villa Libertador prepara sus corsos






(CbaNoticias) La murga "Vientos del Sur" de Villa Libertador se prepara para los corsos de este año. El 28 será el tradicional desfile de carnaval. Murgas y comparsas de barrios aledaños se sumarán a la fiesta.


"Las últimas semanas siempre son las de más trabajo", comentó Marian, quien es una de las encargadas del grupo desde el 2005. Agregó que este año los preparativos del carnaval se complicaron por cuestiones económicas ya que la Municipalidad se había comprometido a aportar un monto de dinero que nunca llegó.


La organización del carnaval en Villa Libertador es algo que involucra a adultos, jóvenes y niños por igual. Familias enteras mueven sus cuerpos al ritmo del redoblante, lo que convierte la murga en un espacio de integración de la comunidad. "Sirve un poco para que los chicos no anden en la calle", mencionó una de las mamás que trabaja todo el año en los talleres culturales de Vientos del Sur.


Este año, la murga tomó la decisión de dividirse por disciplina (baile, percusión, teatro y canto) y no por edad como lo hacía antes. Esta idea surgió después de la visita a un encuentro internacional de murgas en Entre Ríos, donde lo que primaba era la "murga uruguaya" que tiene mucho de teatro y no solamente baile como venían trabajando ellos.


Antes del gran corso del domingo, el 26 de febrero se presentará una obra con personajes y canciones del barrio. La presentación incluirá la presencia de otras comparsas amigas que compartirán la actividad al aire libre.




Represión en el corso de Villa Libertador, Córdoba




El miércoles 03 de febrero a las 18 hs. convocamos a todos y todas a la explanada de la Municipalidad de Córdoba para movilizarnos hasta plaza San Martín y repudiar la represión policial sufrida el domingo después del corso. Exigimos una ordenanza que proteja todas las manifestaciones populares en espacios públicos.


El domingo 28 de febrero casi 15 mil personas festejaron el carnaval en Villa El Libertador. A pesar de que todas las áreas operativas municipales prestaron apoyo, el día viernes el sub-director de espectáculos públicos, Daniel Perez, se niega a dar autorización para el corso ya que argumentó estar de asamblea permanente la repartición, siendo que él es funcionario y no empleado, y por lo tanto no puede estar de asamblea. Esta falta de respuesta trabó la contratación de adicionales de la policía, que la Secreatría de Cultura de la Provincia se había comprometido a pagar por un monto de $5.000. Luego esta mismo funcionario dijo irresponsablemnte que debíamos haber pagado un seguro de responsabilidad civil por un monto de $120 mil.


A pesar de no contar con adicionales, el comisario de la zona se comprometió con los vecinos a reunirse a planificar un operativo conjunto. El comisario de Rivaderos (comisaria 18) y el Superior de turno de la Jefatura Departamental Chavez se habían comprometido a reunirse con los vecinos a las 9 de la mañana del domingo, pero no estuvieron en todo el día en la comisaría argumentando que estaban de reunión en la jefatura departamental. Frustrada la reunión hubo una ausencia absoluta de policía en el corso, solo se sabe por boca de los inspectores de tránsito que un patrullero se les acercó a decirles que se retiraran del corso porque no estaba autorizado.


El corso de Villa El Libertador terminó a las 21 hs con la quema del Rey Momo. Cerca de las 22, cuando estábamos levantando las cosas se arma una pelea en la plaza con algunas corridas de gente asustada. En ese momento se corta la luz, y a segundos del apagón irrumpen en la plaza 5 patrulleros de los que descienden policías efectuando disparos al montón. En ese momento en la plaza todavía había miles de personas con sus familias y niños.


Según testimonios de los vecinos minutos antes del apagón los patrulleros se habían colocado en las calles cercanas con las luces apagadas. También aseguran algunos que antes del corte vieron personal de civil acercarse a ponerse chalecos y cargar con hitacas.


Diez minutos después del apagón un ejército de más de 10 patrulleros entraron a la plaza por la Calle Caracas con las luces apagadas, las que prendieron cuando llegan a la esquina y barrieron la plaza con balas de goma.


Una vecina se acercó a contarnos que en su cuadra estaban 5 patrulleros estacionados con luces apagadas. En otro sector del barrio otro vecino cuanta la misma cantidad de moviles más algunas motos, y otra vecina cuenta que en su cuadra había nueve patrullas esperando. Con todo este ejército asaltan la plaza cuando se corta la luz. 20 minutos después volvió la luz y todavía había familias desesperadas buscando a sus hijos que se habían perdido en las corridas a oscuras.


Desde la organización se va a denunciar el vaciamiento del estado, que no puede poner los adicionales para prevenir pero sí puede traer un ejército a reprimir. Vamos a ir a la municipalidad contra el señor Daniel Perez y responsabilizarlo de dejar sin cobertura de seguridad a esta fiesta popular. Y vamos a denunciar el abrupto operativo claramente represivo que liberó la zona para luego arremeter y perjudicar al corso vecinal. También iniciamos un plan de lucha para exigir que se redacte una ordenanza que proteja las manifestaciones populares en los espacios públicos. No podemos permitir que nos pongan exigencias como si fuéramos el Orfeo o el Rally Mundial. Los sectores populares tenemos derecho a expresarnos libremente para festejar o para protestar.


Corsos de Villa El Libertador les ganan a las asambleas


Enfrentamientos tras corso de Villa El Libertador


Artículo aporte de Diego Robacio y Gabriel "Figu" Roel

¡¡¡Gracias Nacho de Isla por llevarnos nuevamente hasta él!!!  

"DESCONTROLADOS DE BARRACAS", EN LOS CARNAVALES 2010



"La murga llena la calle, es alegría"


Hace 14 años, 300 vecinos interrumpieron lo cotidiano para acercarse al fenómeno del color y el baile: un arte "transformador", según define su director.
Por Francisco Rodriguez para CRITICA DIGITAL

La cita. Este sábado en el Parque Centenario se presentan "Los Descontrolados de Barracas" con su espectáculo "Cambio Climático o Recalentamiento Barrial".
Un 8 de Diciembre de 1996 la murga Los Descontrolados de Barracas hizo su presentación en sociedad bañada en los colores que la identifican: azul, naranja y amarillo. Desde ese día se formó un grupo que crea y produce espectáculos e intervenciones teatrales “con el eje del arte como transformador social, definieron a Critica de la Argentina Ricardo Talento, director general del Circuito Cultural Barracas (CCB) y Mariana Brodiano, directora de la murga.

La murga fue el primer emprendimiento del CCB en el que se reúnen actualmente unos 300 vecinos de todas las edades. Músicos, actores y bailarines forman parte de diferentes proyectos: además de la murga realizan el Teatral Barracas, en el que presentan el espectáculo "El Casamiento de Anita y Mirko" y la Banda "Circuito en Banda".

Los Descontrolados de Barracas muestran su espectáculo "Cambio Climático o Recalentamiento Barrial" en los Carnavales Porteños. Este sábado se presentan en el Parque Centenario.

Talento -¿apellido que predispuso?- cuenta a Crítica de la Argentina el fenómeno de la murga por sus pagos. 

 ¿Cómo se explica el concepto de arte como transformador social? ¿Cómo cumple esa función?

El objetivo del proyecto Circuito Cultural Barracas es incentivar las posibilidades de desarrollar la creatividad que cada vecino tiene de forma inherente. Porque con esto cada uno ve que puede imaginar su individualidad construyendo con otro, en un colectivo. Empieza a visualizar de otra manera su barrio, su vida; comienza a ver de forma creativa su mundo. Cuando un vecino ve que puede, con otro, hacer un espectáculo sabe que ha creado un hecho de encuentro, de alegría y en ese reconocimiento hay un hecho transformador. El arte es en sí mismo es un profundo hecho transformador.

¿Cómo surgieron Los descontrolados de Barracas?

Surge como parte del proyecto del Circuito, de la vocación de construir con los vecinos del barrio un espacio de arte y transformación social. Además, la murga era uno de los lenguajes que manejábamos con los Calandracas, así que surge también de forma natural y el nombre fue elección del grupo de las distintas propuestas que aparecieron.


Luego de casi 14 años de trabajo, ¿qué cambios se produjeron entre los integrantes y su barrio o su entorno?

Cambios hubo muchos. Cuando comenzamos no había centro cultural en Barracas y actualmente ya hay otra murga en el barrio. La murga no es un hecho estable, sino que sus miembros cambian continuamente. Mucha gente del barrio fueron parte de ella: muchos de nuestros vecinos en algún momento ensayaron en la murga y decidieron de que temas hablar en los espectáculos y también es un punto de referencia para la gente de acá. La murga llena la calle, es un hecho de alegría y de vida. Pero también se produjeron otros cambios concretos muy importantes, los vecinos aprendieron a actuar, cantar, a bailar o tocar un instrumento, en definitiva a desarrollar su creatividad. Muchos chicos, por ejemplo, terminaron la secundaria gracias a la murga. Su paso por este espacio les supone una valorización que tiene consecuencias en otros ámbitos, como por ejemplo la escolarización.

¿Cuáles son los requisitos para formar parte del grupo?
Cualquiera que quiera integrarse al grupo puede hacerlo. El primer lunes de cada mes, hacemos una sesión para nuevos integrantes, la primera será el lunes 1 de marzo. Solamente existen un requisito de edad: los más chicos que no vengan acompañados por sus padres, tienen que tener más 8 años.

¿De qué se trata el espectáculo "Cambio Climático o Recalentamiento Barrial"?

En el grupo apareció la idea de que el cambio climático nos era presentado como un nuevo terror de la humanidad y no como un hecho para construir de forma positiva. No se propone una construcción nueva, un cambio de vida hacía otras posibilidades de desarrollo, sino que se nos presenta como un terror porque el miedo es siempre una forma de tener subyugada a la gente. A partir de este nuevo terror, comenzamos a hablar también de nuestros terrores concretos, barriales: la nueva inmigración, la
inseguridad, la contaminación; entonces con humor e ironía, titulamos "Cambio Climático o Recalentamiento Barrial", para hablar de los recalentamientos que hay en nuestro barrio, y en definitiva hablar de nuestra ciudad y nuestro mundo. Tocamos temas que parten de lo concreto pero llegan a lo general. Por lo general, cada dos años hacemos un trabajo grupal, sobre lo que queremos contar. Improvisamos, discutimos y de ahí se define el interés del colectivo por un tema u otro. Siempre tiene que ver sobre lo que ocurre en cada momento en el que estamos creando como cuando en el año 2000 hablábamos sobre los sueños incumplidos en nuestro espectáculo "Hay que pasar el
milenio".

OPINIÓN


La murga como hecho artístico y social  por Mariana Brodiano (directora de la murga “Los Descontrolados de Barracas)

Cada murga es un elemento integrador: de distintas generaciones y distintas formas de expresión. La murga integra diferentes géneros artísticos como el baile, la música, la letrística, la teatralidad, la plástica y así otros más. Pero pierde sentido cuando pierde el hecho artístico. Si no hay un críterio artístico para generar un espectáculo como hecho de comunicación se convierte en una herramienta y no en un hecho transformador en sí mismo. En Buenos Aires hay multitud de murgas y todas ellas son un elemento de integración que cumplen una función social importante pero no todas son un hecho artístico y eso es lo que todo murguero tiene que tener en claro. Que desarrolla su arte en un espacio público al que resignifica porque en ese lugar se ensaya y se actúa provocando una comunicación con el otro. Una murga debe sumar a la función social intrínseca la calidad de sus espectáculos como hecho transformador.


Contribución de Nacho de Isla






Los días 26, 27 y 28 de febrero, se festejó por novena vez consecutiva el Cumple Carnaval de Pocho en barrio Ludueña. La mística de la celebración se apoderó de la plaza Pocho Lepratti y allí estuvo enREDando. Hubo murgas, música, talleres, feria de organizaciones y el ritual esperado con la quema del Rey Momo. El carnaval es un grito de justicia que, en la tierra de Ludueña, se multiplica en vida y alegría. Y el arte lo hace posible. En este informe, además, compartimos otras experiencias artísticas que luchan por nuevos mundos en este, nuestro mundo.

Ludueña es tierra de carnaval y durante esos días, en esta parte de la tierra, todo vale.

El barrio de la zona oeste de Rosario se convierte, de pronto, en un escenario imbuido por la mística carnavalera. Magia, color, bailes. La luna llena, de testigo. Las levitas dominan la escena y se adueñan de los cuerpos sudados por el húmedo calor de febrero. Y las almas endiabladas salen a la luz de la noche, con el brillo propio de un genuino carnaval de resistencia. Porque de eso habla la tierra de Ludueña. Y tiembla, cuando suenan los redoblantes y los silbatos apuntan al cielo. Alegría y memoria. Colores fuertes y grises empañados recuerdan la masacre del 2001. Risas y nudos en la garganta aprietan la imagen de un Pocho Lepratti multiplicado en miles.


Contrastes de un carnaval que convoca a la barriada a festejar y, fundamentalmente, a hacer visible aquello que le han robado. Menos la alegría, a la tierra de Ludueña le quitaron casi todo: trabajo, posibilidades, salud, educación, justicia. Hasta el rótulo del infierno le han puesto. Tierra de nadie, así la llaman los grandes multimedios de esta ciudad.


Sin embargo, las voces que habitan el barrio cuentan de una tierra donde los muros hablan. Y dicen que allí, el fuego ilumina los rostros empapados de alegría gritando justicia. Y dicen que ésta es la tierra de alguien. Del Pocho, de los pibes del Bodegón Cultural, de los laburantes, mujeres y hombres de Ludueña. Pero de ese barrio no hablan los diarios. Quizá porque le temen demasiado a los murales endiablados y enrojecidos con la tinta sangre de la memoria.

O tal vez, porque nunca pisaron la tierra del carnaval. Porque le esquivan al fuego y al Rey momo. Porque les asustan las levitas memoriosas, las máscaras de los más chicos, las letras del rock farolero, las hormigas que dan vueltas por la plaza.

No se animan a pisar la tierra donde el carnaval une hasta el imposible y hace accesible aquello que otros le quitaron. De esa tierra, donde el diablo mete la cola para denunciar las muertes impunes del 2001, no se habla. Parecen querer silenciarla, enterrarla en el olvido.


Pero los tambores anuncian la llegada del carnaval y es imposible no escuchar. Los ecos de la dignidad se oyen hasta en estos tiempos olvidados de Dios.
 
Milton


“El carnaval significa el cierre y la apertura de un montón de cosas. En el año 2002 la Murga de los trapos cumplía años y se juntaron todas las murgas para hacer algo. Durante ese año, comenzamos a pensar que era posible hacer algo, y esto coincidía con el cumple de Pocho, el 27 de febrero. Por eso, decidimos comenzar con el Carnaval-Cumple de Pocho”, cuenta Milton, uno de los pilares del Bodegón Cultural Casa de Pocho.

El pasado 26 de febrero se inició la novena edición del carnaval. Infaltable es la participación de numerosas organizaciones sociales que acompañan cada año, además de murgas y bandas de rock. El carnaval de Ludueña es el símbolo de una resistencia anudada en otras microscópicas huellas que recorren la ciudad: Villa Banana, Las Flores, la Tablada, barriadas presentes durante estos tres días.

El 26 y 27 se realizaron talleres de percusión, de mujeres y de memoria. Tocaron bandas de rock y desfilaron las murgas con la infaltable conducción de Emilio sobre el escenario. El cierre del sábado tuvo un invitado especial: el Raly Barrionuevo.

El domingo 28, el carnaval se bajó del escenario para escuchar las voces de todas las organizaciones, sus recorridos y andares, y, de esta manera, trazar un mapa de la resistencia. “Esto surgió en diciembre, cuando se realizó un mapa de los caídos en el 2001. Esto fue el puntapié para realizar algo con las organizaciones, poder agruparnos y trabajar en conjunto. La idea es intercambiar experiencias con otros barrios y ver cómo poder darnos una mano entre todos”.

El carnaval es de la gente del barrio. Participan los vecinos, no sólo en los festejos sino además, en los talleres que se organizan durante estos días. Y también, me dice Milton, vienen porque saben que es una causa justa. “Nosotros decimos que la alegría es nuestra mejor arma y que no nos maten la alegría. Por eso queremos partir de esa palabra y hacer cosas en el barrio. Nosotros creemos que duele más esto, que uno se ría, que haya bandas, que la gente baile, que la gente discuta, a salir a hacer a querer golpear a alguien”. Es que a Milton, como a muchos pibes en Ludueña, le enseñaron “a poner el cuerpo por el que tenemos al lado.” “Como todos los años el carnaval tiene más fuerza porque se supo quien era Pocho y porque en esta plaza Pocho ha hecho muchas cosas y pasaba todos los días en bicicleta por acá. Este es un lugar de encuentro para el barrio”.

¿Cómo anda el Bodegón? le pregunto a Milton. Con la colaboración de artistas y músicos como León Gieco y el grupo Farolitos, la casa de Pocho se amplía. “Se pudo juntar una plata y se volcó toda al Bodegón. Ahora se está terminando la primer parte que es la planta baja. La idea es que la gente del barrio se sume a usar la casa porque por eso es el Bodegón Cultural”, me cuenta, a la par que deja abierta la puerta de la Casa para ingresar y participar. Talleres de radio, de guitarra, de arte, la revista Tierra de Alguién, el taller de mujeres, son algunas de las actividades para chicos y jóvenes que impulsa el Bodegón. Allí, saben que la situación social para los pibes del barrio es cada vez más difícil. “La situación está media complicada, no por los pibes, sino por el sistema. Te abren una calle y te dan un ladrillo y ponen asfalto, pero no te dan comida ni trabajo. Esto es muy loco. Se hicieron varias obras en el barrio pero todavía el laburo sigue sin existir. Hay muchos pibes que se están matando con la droga y es muy complicado contenerlo. Por eso también, hemos perdidos muchos amigos y hermanos”.

A Ludueña la marcaron como zona roja, tierra de nadie, lugar donde es imposible ingresar. “Acá por ejemplo no ingresa un taxi, porque dicen que es zona de peligro. En el barrio decimos que Ludueña no es el paraíso pero tampoco es el infierno. Así como hay pibes que chorean por toda esta situación, también hay tipos que se levantan a la 6 de la mañana y le ponen el lomo a un patrón 10,12 horas y vuelven a sus casas, comen, se acuestan y al otro día hacen lo mismo”. Para Milton es importante decir, desde el barrio, los que los medios de comunicación ocultan. “Si ellos muestran una cara, tenemos que mostrar el lado b”. “Pudimos armar una especie de radio cabina en la Casa de Pocho. La idea es tener un pequeño espacio radio en el barrio que estamos construyendo con la ayuda de Aire Libre, porque vemos que en los medios se dicen puras mentiras. Nosotros decimos que Ludueña es tierra de alguien”.

Un hilo fino y delgado traza el caminito de los talleres culturales de la Casa de Pocho y de lo que se vive cada año en el carnaval. Es el hilo que trae de la mano, el arte como herramienta de transformación social. “Tanto la música, como los murales o como la letra misma de las cosas que hacen los chicos, es una gran herramienta para poder denunciar. Y eso se ve muy fuerte acá, porque esa es la idea, mostrar lo que nos pasa en el barrio. Nosotros queremos mostrar otra cosa y lo hacemos desde lo cultural, lo plástico, lo artístico, la música”. Incluso, hasta un ritmo puede denunciar y significar un grito de protesta. “El bombo siempre se ha usado como herramienta de protesta, con un simple golpe poder decir cosas y descargar lo que uno tiene, y en el contexto donde suena puede decir muchas cosas”, finaliza Milton la charla, dando cuenta de la fuerza que tienen los tambores en Ludueña.

Celeste

Caía la tarde del sábado en la Plaza Pocho Lepratti, ubicada en Velez Sársfield y Larrea. Allí encontramos a la hermana de Pocho, Celeste Lepratti. “Este espacio va creciendo y se va naturalizando. Podemos ver que en el futuro no nos pensamos sin este espacio, no solo nosotros, sino todo el barrio. La gente se ha ido apropiando y esto es lo que va cambiando a otros años”, dice, mientras saluda a compañeras del barrio y de a poco, se zambulle en la mística del carnaval.

“La gente del barrio se está sumando cada vez más y es lo que buscamos, que los vecinos sean los protagonistas. Vienen a sumarse a las actividades y a los talleres, incluso, participan en la organización previa”.

Para Celeste, el carnaval es un grito de justica que ya lleva 9 años. “Aca estamos diciendo que la impunidad sigue, que no nos olvidamos de lo que nos pasó en el 2001, que seguimos adelante con la bandera de Pocho y de los caídos del 2001”.

Semanas atrás el diputado nacional reutemista Daniel Germano, declaro públicamente desconocer los cadáveres del 2001. Además, manifestó que lo de Claudio Pocho Lepratti fue un “hecho desgraciado”. “No me vengan a inventar héroes”, apuntó este diputado, haciendo uso de su hipocresía y la impunidad que aun gobierna en la provincia de Santa Fe. Estas declaraciones calaron hondo en las familiares de las víctimas que aun siguen reclamando justicia. “Por un lado no causa sorpresa sabiendo de quién viene y quiénes son estos señores. Pero, por otro lado, uno siente que falta de dignidad tienen algunos. Es mucho más que una falta de respeto. Uno puede hablar de lo que están, pero negar a los que están muertos, calificarlos, juzgarlos, realmente es algo bajo. Nosotros nos seguimos preguntando donde vivirá este señor porque quisiéramos acercarle los certificados de defunción, al menos de 9 personas, a ver si tiene algo para decirnos”, expresa una Celeste Lepratti dolida, inundanda de un profunda sensanción de indignación.

Vanesa

Uno de los talleres que se realizó en la tarde del viernes 26, fue el de mujeres. En el Bodegón Cultural desde hace dos años, aproximadamente, funciona un espacio donde mujeres del barrio se juntan a charlar y poner en palabras, hechos de violencia, acoso o discriminación que sufren. Vanesa es una de las coordinadoras.

“Se trabajo todo lo que venimos haciendo estos dos años, sobre el aborto, la violencia, sobre las cuestiones de género. La idea del taller era escribir palabras en cartulina y separarlas en un espacio. Nos presentamos y luego cada grupo agarraba una de las cartulinas que tenía distintas frases o preguntas y después la disctutíamos entre todos. El cierre fue un juego que hicimos con maderas que tenían 12 ventanitas. Cada ventana tenía un mito sobre la mujer. La idea era tirarle una pelota para que se dé vuelta ese mito”.

Vanesa cuenta que el espacio de mujeres del Bodegón tiene una participación variada, ya que es difícil sostenerlo. “Cuesta mucho, son mujeres grandes con una problemática muy dificil, muchas veces golpeadas, que les cuesta hablar, a veces vienen, si les gusta, vuelven y sino les gusta, ya no vuelven. A veces somos 5, a veces 10. Todo depende. Además, todas trabajan y a veces están muy cansadas”.

El impulso para iniciar el espacio surgió a partir de un taller que realizaron las compañeras de AMMAR, sobre enfermedades de transmisión sexual. Y de a poco, el grupo se fue consolidando ante la necesidad de contar con un momento de escucha para las mujeres del barrio. “Acá en el barrio, la situación es como en todos lados. Son mujeres alusinantes y no conoces otra parte que no sea la limpieza o atender a su marido. Por eso es importante tirar algunas puntas”. Poner en palabras, de eso se trata.

Murgueritos

Los más chicos se pasearon por el escenario. Primero, pintaron sus propias máscaras. Le pusieron color a la tarde. Las manos empapadas en tintas rojas, verdes, amarillas. Los rostros coloreados, salpicados de gotas de calor y color. Algunos, dibujaron concentrados sobre las cartulinas, poniéndole seriedad a la magia disparatada del carnaval.

Luego, se vistieron de murgueros. Levitas y patadas al aire. No faltó la timidez, pero el impulso del barrio, los colocó en el lugar indicado: el centro de la plaza, que también tenía sus leyendas marcadas a fuego en el empedrado. El Pocho Vive está mas latente que nunca.


Una de las murgas que llegaron al festival, fue la de los Pumitas, uno de los barrios tobas de Rosario. Oscar Talero, emocionado, cuenta que “es una experiencia muy linda para los chicos y la comunidad estar hoy en el carnaval, estamos muy agradecidos de haber sido convocados. Esto nos motiva para seguir apostando a que los niños valoren sus habilidades e inteligencia, es un camino que aprendemos de otras organizaciones, Ludueña es un punto de referencia para nosotros”.

El Centro Comunitario Quamloqtec cuenta con talleres de murga, informática, guitarra, danzas autóctonas, apoyo cultural, de oficio –herrería, lo único que necesitamos son capacitadores en herrería. Crece, de a poquito, y suma trabajo, esfuerzo y lo que es fundamental, el apoyo de la comunidad toba, la tercera más populosa de la ciudad.


Rey Momo

Al cierre de la desprejuiciada noche de sábado, el ritual se apoderó del barrio. Allí estaba, a la espera de su fuego sagrado. La quema y la conjura de una esperanza que se hace ceniza en el viento. Morir y renacer. La quema del Rey Momo es el rito que hace de la quimera un sueño posible. La muerte en su estado más terrenal que, entre llamas, se multiplica en vida. Algo de esto pasa en Ludueña, los días en que el cumple de Pocho Lepratti se festeja y la memoria se enciende, y el fuego de la alegría ilumina el rostro de su lucha.

Algo de esto sucede en la tierra que algunos, no se animan a pisar.




 

'Ceci nest pas une murga' (Esto no es una murga)

En esto lo esencial es participar

El músico argentino Enrique Noviello se radicó en Amberes tras la crisis de 2001 y gestó allí una agrupación murguera con características locales propias. Ahora ya existe una docena, cada una con una personalidad diferente.

A menudo, y con más énfasis en esta época, los tambores entregan a las calles de Buenos Aires parte de la herencia que los esclavos africanos dejaron por estas tierras. El calor es parte de ese paisaje, también el color y el barrio: elementos que condensan la esencia de la murga porteña. Cuesta creerlo, pero en este mismo mes, el año pasado, en Bélgica hubo sólo treinta y tres horas de sol, y eso no hizo que las murgas se callaran (bueno, el calor tampoco es condición sine qua non). ¿Las qué? Con esa desorientación les responden los belgas a Enrique Noviello, argentino residente en ese país y director de Los Murginales, cuando los invita a acercarse a sus talleres. Podría decirse, también, que es uno de los culpables de que la Argentina y Bélgica tengan en común más que el gusto por la cerveza y los chocolates.

Esa murga que se gestó, con sus particularidades, muy lejos del Río de La Plata, vuelve a su punto de origen para los festejos del Carnaval. Noviello y representantes de otras agrupaciones de Amberes actuarán esta noche a las 21 en el Centro Cultural Ricardo Rojas (Av. Corrientes 1543) y la semana próxima en el Espacio Cultural Nuestros Hijos (Av. del Libertador 8465). En ambas oportunidades, los visitantes se presentarán en compañía del coro La Matraca, con Coco Romero a la cabeza, para recrear una pequeña historia musical con algunos guiños de comicidad, algo así como un River-Boca de las murgas, adelanta Noviello en la charla con Página/12. Resulta gracioso ver cómo una joven belga pispea un texto en castellano incrustado entre sus pies, para demostrar a los porteños que ella también puede hacer murga y de la buena. El encuentro se propone, también, como un intercambio. Romero ya viajó a Bélgica, por ejemplo, para participar de un foro internacional. Y ahora el objetivo es que los murgueros de ese país conozcan de cerca el carnaval porteño.

En Bélgica las murgas son un fenómeno en crecimiento: desde 2006 hasta hoy, ya aparecieron doce agrupaciones. La primera fue Los Murginales, con un debut que signaría un poco su historia y su cauce. Porque la calle es “la de las ollas militantes, diría Ignacio Copani, y eso aunque ellos hayan sido los que salieron con cacerolas de teflon. “Estábamos planeando por dónde arrancar y justo sucedió que un neofascista salió a la calle a matar gente. Se organizó un festival en repudio de este tipo de situaciones, porque había un trasfondo de reacciones de intolerancia de la extrema derecha. Salimos con las cacerolas a cantar temas de Los Fabulosos Cadillacs en la cara a la ministra de Cultura. Eso
fue como el gen del proyecto, recuerda Noviello, quien arrancó por sugerencia de su amigo Gerardo Salinas, gestor cultural.

La idea surgió luego del éxito que tuvo en Bélgica un festival de tango. Nos largamos con el criterio de reproducir la murga como espacio de interacción social, sin caer en el cliché del género. Claro. Para entender lo que allá significa una murga hay que detenerse en varias cuestiones. No se puede hacer una orquesta de tango en Japón si los pibes no van a un café o no saben lo que es un conventillo. Pueden tocar muy bien, pero es el formato sin el contenido. El propósito no era una murga, sino la murga como concepto de comunión y de reunión social, explica Noviello.

Por otro lado, la variedad de nacionalidades también influye sobre el resultado, bien distinto al porteño. Hay un diálogo intercultural. Al principio éramos cincuenta personas de trece países: marroquíes, franceses, venezolanos, belgas, argentinos... Era un quilombo. Como la propuesta está
ligada a la identidad, cada murga busca la propia.Lâamour Gaga es teatro itinerante, Fata Murgana mezcla música gitana con danza del vientre, Sentimiento Verde une elementos africanos y brasileños. “Hasta se pueden ver murgas con raperos que bailan breakdance en la calle. Y también hay una
deformidad en cuanto a instrumentos: bombo con platillo, banjo, percusión y vientos, concluye. Aunque cada una con sus particularidades, las murgas belgas tienen un marco común de creación: baile, música, poesía e indumentaria que identifique al grupo. Al igual que sus hermanas rioplatenses, se reúnen todos los años en un corso, pero en junio.

En plena crisis de 2001, Noviello viajó a Bélgica y vivió durante un tiempo en una casa ocupada con gente de distintas procedencias. “Me invitaron a vivir con ellos cuando vieron que tocaba el saxo. Eran del palo del punk. La murga salió con un grupo más abierto, porque hay personas más papistas que el Papa: maquillarse y disfrazarse no les gustaba. Tienen otro perfil, más combativo.

En Buenos Aires, había participado de una murga por un breve período, suficiente como para darse cuenta de lo que buscaba artísticamente. Cuando soñaba con ser un buen instrumentista, atormentado con Miles Davis y John Coltrane, pasaba ocho horas en mi casa estudiando para dominar la técnica del
instrumento. Ahora comparto todo con gente de carne y hueso. Lo que nos haga bien, va a hacernos bien a todos. Su mujer, y codirectora de Los Murginales, Joana Rossi, comparte esa visión: La esencia de lo que hacemos es participar. Cada vez le damos más bola a lo artístico, pero no descuidamos el aspecto social. La gente viene con un bagaje, nosotros intentamos descubrirla.

La murga tiene que tratar de satisfacer necesidades de diferentes pueblos, concluye Noviello. Y pone como ejemplo a una agrupación en Rotterdam que busca la integración de drogadictos. También un viaje de Los Murginales a Soweto (Sudáfrica) que culminó en la conformación de una murga allá, llamada Nathi. Fue como estar laburando en la Villa 31. Veías tribus enemigas enseñándose
bailes. No es que los chicos van a salir de la miseria... uno no es político. Pero podemos ser actores sociales desde lugares mucho más simples, reflexiona.

En Bélgica, la ola murguera nacida en Amberes ya reunió a más de 800 personas y comienza a expandirse por el norte. Tampoco es casual que haya pegado allí primero. Amberes tiene muchas caras. Hay gente con muchísima guita, pero también hay una contracultura muy fuerte, como la conformada por okupas y hippies viejos, que vio y vivió otra cosa. Para todo ese público un proyecto como éste es súper interesante, explica Noviello. Hay un contraste, entonces, de cosas que brillan: los diamantes que se exhiben en las vidrieras y las caras maquilladas que piden que, en este febrero, el sol salga un poco más.

Informe: María Daniela Yaccar.

Murgueros hasta en el fin del mundo


"Nunca pensé que me encontraría con esto. Viendo a personajes de una murga que parecen sacados de Asterix, o dar charlas en una de las universidades más viejas del mundo o en un castillo del siglo VI." El que habla es Coco Romero, murguero, historiador de la murga, uno de los principales referentes de esta expresión cultural, e impulsor desde su trabajo en el Centro Cultural Rojas. Allí, el último sábado, fue con su agrupación La Matraca anfitrión en un espectáculo que compartió con una murga de raíz porteña que nació en Bélgica, a instancias de dos argentinos, Gerardo Salinas y Enrique Noviello (en la sección Ultima Página se publicó el 14 de este mes una entrevista con Noviello, titulada "La idea de una murga en Amberes no era tan loca").

El movimiento murguero es grande y heterogéneo. Incluso por los instrumentos que usan, que no son habituales en la murga porteña. La delegación que arribó a Buenos Aires llegó encabezada por Noviello y alista a "Femke Van Poucke, coordinadora, y Nele Paelinck, acordeonista de L´amour Gaga, la murga del amor con una propuesta teatral itinerante" detalla Romero. "También a Loes Minnebo, que es trombonista de Fata Murgana; Fanny Heuten, directora y bailarina de Sentimiento Verde, la murga que une elementos africanos y brasileños; Marc Pauwels, saxofonista, y Joana Rossi, codirectora y bailarina de Los Murginales, agrupación creada por Noviello."

Ciclo de recitales


Además de la actuación en el Rojas, se presentarán este fin de semana en el Ecunhi. Porque hoy y mañana, en el Espacio Cultural Nuestros Hijos, de Avenida del Libertador 8465, habrá dos importantes jornadas de carnaval. Esta noche, a partir de las 20.30, estarán La Matraca y murgueros belgas. El sábado, desde las 16, se podrá disfrutar de varias actividades. Además de estas dos agrupaciones que volverán a este espacio, habrá desfiles de La Contracara Murga, Pasión Quemera y Los Verdes de Montserrat; se proyectará Blanco & carmín . La murga según Pasión Quemera , película de Paula Horman y Daniel Vidal, y luego, se verá el espectáculo Los tambores no callan, presentado por un grupo de artistas reunidos a modo de cuerda de candombe y elenco de danza.

"Todo esto me parece impresionante", resume Coco. "Empezó con la invitación a Amberes, para dar talleres. Me pareció interesante la apertura de la murga y la labor del Estado con la iniciativa de un trabajo social de integración. Ahí ves que es como la murga nuestra. Están el gordo y el flaco, el lindo y el feo, el que tiene trabajo y el que no."


La delegación de Amberes es seguida por la cámara de Andrés Lubbert, porque esas grabaciones serán para el documental que cuente esta experiencia.

-¿Esto queda en la función de integración social o tiene un perfil artístico?

-Mirá, Los Quitapenas [nacidos en los talleres de murga del Centro Cultural Rojas] tienen 21 años. Esto significa que si se incentiva la ampliación del campo creativo, lo artístico va a llegar después. El discurso artístico es perfectible hasta el infinito. Lo importante es que se trata de una red fuera del sistema comercial y que la murga gana la calle. Nuestra murga crece así. Y eso, en Europa, se está dando así. Es ese idea y vuelta. La murga llegó al Río de la Plata a fines del siglo XIX y ahora vuelve. Otra característica interesante es que funciona como dispositivo que se entrelaza con el folklore de los lugares.




Las murgas porteñas buscan un guiño de la lluvia para comenzar los desfiles de carnaval

Si el clima lo permite, mañana arrancarán los festejos en la Ciudad. Habrá 33 corsos, tres más que el año pasado. Y los cortes de calle comenzarán alrededor de las 18. Los desfiles seguirán todo el mes y contarán con la participación de 107 agrupaciones.

Un esfuerzo extra de Dios Momo. Con tono de rezo y ritmo de bombo con platillo, las murgas buscan cambiar el gris de la lluviosa tarde porteña por el tapizado multicolor que regalan levitas y sombreros. Si el tiempo lo permite, mañana comenzarán los festejos de carnaval en la Ciudad, que incluyen 33 corsos y la actuación de 107 agrupaciones.

En Capital, habrá festejos en Abasto, Almagro, Balvanera, Barracas, Boedo, Caballito, Flores, Coghlan, Colegiales, Floresta, Liniers, Lugano, Mataderos, Parque Avellaneda, Parque Centenario, Parque Chacabuco, Parque Patricios, Paternal, Piedrabuena, Pompeya, Saavedra, San Telmo, Villa Crespo, Villa Luro, Villa Pueyrredón y Villa Urquiza. Se estima que desfilarán alrededor de 15 mil
artistas populares. El año pasado, las celebraciones convocaron a casi 250 mil personas por fin de semana.

Este año, el circuito que organiza el Gobierno porteño incluye 33 corsos, tres más que en 2009. A esa programación hay que sumarle los festejos que realizan agrupaciones independientes, tanto en la Ciudad como en el Gran Buenos Aires. El sábado, los desfiles se realizarán entre las 19 y las 2 de la madrugada, mientras que el domingo se efectuarán entre las 19 y las 24. Los cortes de calle
arrancarán alrededor de las 18.

Los festejos se realizarán durante todos los sábados y domingos de febrero. Y en algunos casos, también incluirán el lunes 15. Esa día y el martes 16 son jornadas no laborables en el Gobierno porteño. A nivel nacional sigue vigente una ley de la última dictadura militar, que derogó los feriados de lunes y martes de carnaval. Este año, las murgas porteñas marcharán en ambas jornadas para pedir su restitución.

Las celebraciones en la calle tendrán su reflejo en distintos espacios culturales de la Ciudad. El jueves 11, el renovado Anfiteatro del Parque Centenario recibirá al "Carnaval de las dos orillas", un espectáculo que contará con la participación de la murga porteña Los Quitapenas y la agrupación uruguaya Agarrate Catalina.

Además, el Centro Cultural Ricardo Rojas -dependiente de la UBA- será escenario de un encuentro entre murgueros belgas y argentinos. Las presentaciones se realizarán el 19 y 20 de febrero e incluirán la actuación del coro La Matraca y artistas invitados. También se sumarán a los festejos los centros culturales Resurgimiento (La Paternal), Marcó del Pont (Flores) y Adán Buenosyares (Parque
Chacabuco).




Hoy comienzan los corsos barriales, con más de 100 murgas El carnaval copa las calles de la Ciudad


Los festejos del carnaval comenzarán hoy en la Ciudad de Buenos Aires con 33 corsos ubicados en calles y avenidas, de distintos barrios por donde desfilarán más de 100 agrupaciones, todos los fines de semana de este mes. Los corsos tienen como principal espectáculo la actuación de las murgas porteñas, otras agrupaciones de carnaval invitadas, grupos humorísticos y musicales, disfraces, bailes y el característico juego de espuma que completan la fiesta del dios Momo.

En total desfilarán por Buenos Aires unas 106 agrupaciones de carnaval, según la programación de la Comisión de Carnaval y del Programa Carnaval Porteño del Ministerio de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires.

Los organizadores precisaron que en estos carnavales se van a realizar señalizaciones para desviar el tránsito en aquellas calles y avenidas donde se hacen los corsos. Los festejos se realizarán los sábados entre las 19 y las 2 y los domingos entre las 19 y las 24.


Por todos lados

Este año habrá corsos en los barrios de Abasto, Almagro, Balvanera, Barracas, Boedo, Caballito, Flores, Coghlan, Colegiales, Floresta, Liniers, Lugano, Mataderos, Monte Castro, Parque Avellaneda, Parque Centenario, Parque Chacabuco, Parque Patricios, Paternal, Piedrabuena, Pompeya, Saavedra, San Telmo, Villa Crespo, Villa Pueyrredón, Villa Urquiza.


Presencia uruguaya

Desfilarán por los distintos corsos los Elegantes de Saavedra, Los Reyes del Movimiento, Auténticos Rayados de Lugano, Gambeteando el Empedrado, Alucinados de Parque Patricios, Atrevidos por Costumbre, Calaveras de Constitución, Gloriosa de Boedo, Chiflados de Boedo, Los Mismos de Siempre, Pasión Quemera, entre otras.

Asimismo, habrá festejos en distintos espacios culturales de la ciudad y se realizará por primera vez un encuentro en el que confluirán muestras del carnaval porteño y uruguayo bajo la denominación de "Carnaval de las dos Orillas".

Este encuentro se llevará a cabo el 11 de febrero en el Anfiteatro Eva Perón del Parque Centenario, en Leopoldo Marechal y Lillio, y participarán la agrupación uruguaya Agarrate Catalina y la murga porteña Quitapenas.

El anfiteatro del Parque Centenario será escenario también de festejos carnavaleros, los dos últimos fines de semana de febrero, con la actuación de murgas porteñas. Los espacios culturales que participarán de los festejos de carnaval, con murgas, tango y muestras de arte, son tres: el Resurgimiento, Marcó del Pont y Adán Buenos Aires.

Los festejos de la ciudad no abarcarán este año los corsos del lunes y martes de carnaval porque las autoridades no otorgaron los cortes de calles, informó la Comisión de Carnaval, a pesar de que se venían realizando en años anteriores.

No obstante, el Reglamento 2010 del Carnaval porteño que establece las características y condiciones en que se realizan los festejos, define en su primer capítulo que los mismos "tendrán una duración total de cuatro fines de semana, a los que se suman los días lunes y martes de Carnaval, a saber 15 y 16
de febrero de 2010".

Esos dos días no son laborables en el ámbito porteño, según la ley 1322 de 2004 que incorpora a los festejos de carnaval el tradicional lunes y martes.

Ley todavía vigente

En tanto, a nivel nacional sigue vigente la ley de la última dictadura militar que prohibió el festejo de esos días y lo borró del almanaque, porque hasta 1976 el lunes y martes de carnaval eran feriados nacionales.
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Los distritos aprietan el pomo y reciben a los Carnavales

Menos en Lomas, donde se prohibieron por decreto, en todo el Conurbano habrá corsos, murgas y fiesta.

Una bomba de agua, lanzada con extraordinaria puntería, explota en el pecho de un casual transeúnte. Las risas pícaras de varios niños se alejan mientras sus pies a aceleran el paso. La víctima lanza un insulto hacia sus atacantes e inútilmente se seca con la mano y sigue su camino maldiciendo su suerte. Y sí, apriete el pomo que es Carnaval.

Más allá de las costumbres regionales, en cada rincón del país carnaval es sinónimo de diversión. Por eso, lejos del corsódromo entrerriano y de los diablos norteños, en la Ciudad de Buenos Aires y "sus alrededores" (el Conurbano) también los barrios se preparan para la festividad más alegre del año con murgas, bailes y música.

En La Matanza, la tradición se reaviva con la quinta edición de "Vivan los carnavales", un programa municipal que incorpora a las murgas tradicionales matanceras y a distintas agrupaciones de carnaval procedentes del noroeste del país así como también a aquellos representantes de las colectividades bolivianas, uruguayas, y/o brasileras que residen o desempeñan sus actividades culturales en el partido. Además, se convoca a los grupos de jóvenes que participan en los programas de la Dirección de Juventud.

En 2009, el evento convocó a más de 25 mil personas en Tapiales y San Justo y, este año, el municipio volverá a desplegar todo el colorido del carnaval durante el fin de semana del 12, 13 y 14 en la intercepción de las calles Altolarrigue y Humaitá, en Tapiales. Y, el 19, 20 y 21 la celebración se mudará a la plaza de San Justo.

En Morón el mes del carnaval es una fiesta: durante todo febrero habrá bailes, murgas y desfiles de carnaval en diferentes barrios del distrito. Organizados por la Dirección de Arte y Cultura del Municipio de Morón, los vecinos podrán disfrutar de una variada oferta de espectáculos al aire libre. Habrá conciertos, teatro y cine con entrada libre y gratuita, en el marco de "Carnavales en los
barrios"

En Moreno "Se Viene el Carnaval" los días 13,14, 20 y 21 de febrero, una fiesta para disfrutar en familia en la plaza Dr. Buján. "La idea y objetivo de estas jornadas de encuentro, es tratar de rescatar la tradición festiva del Carnaval de antaño; con la presencia y lucimiento de los Centros de Murga, Comparsas" dice Gladis Manrique, directora de Cultura.

Entre las murgas y comparsas, ya han confirmado su presencia: Le puse Cuca; Contracara, Los Reyes de la Murga, Los Diablitos, Estrella Murguera, Espíritu Cascabelero y Los piantados de Paso del Rey.

En las distintas jornadas habrá desfiles, shows, mucha música, baile, concurso de disfraces y cabezudos; y la visita de las murgas, para disfrutar en familia y con amigos. Desde la Dirección de Cultura, se esta convocando a todas las agrupaciones murgueras del Distrito para participar del festejo, como así también de los Concursos, de Cabezudos y Disfraces para los mas chicos, que se realizarán en este marco, como así también a la comunidad morenense a disfrutar de las jornadas de carnaval en la Plaza Dr. Buján.

General Rodríguez tuvo polémica con la festividad por la quejas de algunos vecinos. Pero, luego de idas y vueltas y de un petitorio con 3 mil firmas, se confirmó que habrá carnaval en el distrito comandado por Marcelo Coronel.

En el Sur, Avellaneda celebra el décimo aniversario de la murga "Prisioneros del Delirio", los días 6, 7, 20 y 21 de febrero a partir de las 21, en la Avenida Roca en su intersección con la Avenida Debenedetti de Sarandí. El corso es gratuito, se podrá jugar con nieve artificial y habrá stands de venta de gaseosas, choripanes, y hamburguesas. También, se presentarán varios grupos murgueros y la murga anfitriona cerrará los corsos, poco después de la medianoche.

Por el lado de Lanús, la intendencia prepara una "fiesta popular", en Hipólito de Yrigoyen y Beltrán, el 14 de febrero. Habrá murgas y diversas colectividades deleitarán al público con sus comidas típicas y una feria de artesanías.

Asimismo, Florencio Varela llevará a cabo los "Carnavales Varelenses 2010", los sábados 6, 13 y 20 de enero, a partir de las 21 horas, en la avenida San Martín desde la Curva de Berraymundo hasta la Diagonal Granaderos.

En la séptima edición, del evento participarán tres comparsas: "Varela La" que interpretará en vestuario, música, coreografía, batucada y carrosa "El Bicentenario de Nuestra Patria"; "Piripipí" que presentará "La Argentina Natural" y Marimar, que hará "Navidad y Mundo de Juguetes".

La locución del evento la realizará la conductora televisiva de Pasión de Sábados Marcela Baños, quien cederá el turno a los animadores de cada uno de los grupos que competirán. Cuando sea el turno de las comparsas, se mostrará en escena el trabajo de arduos meses de bordado, cocido de lentejuelas y plumas, armado de carrozas entre tantos esfuerzos realizados por cada una de las organizaciones de "Varela La", Marimar" y Piripipí.

En tanto, durante la última jornada estarán presentes "Los del Fuego" y "Walter Encinas". Si llueve, el festejo se pasa al sábado siguiente y así sucesivamente. Por su parte, San Martín saldrá a la cancha con todo: como ocurre desde 2007, las comparsas más delirantes se unirán en el CEMEF, para celebrar un nuevo "Gran Corso Familiar". Un evento que promete ubicar al distrito como "el epicentro del carnaval" en el Conurbano.

El evento es organizado por la Asociación Cultural de Murgas y Comparsas Unidas y auspiciado por el municipio; de la fiesta participarán comparsas como La Batucada de Ramón, Los Soñadores de Villa Ballester, La Tricolor de Villa Maipú, y Los Diferentes, de Tropezón, entre otras murgas de Suárez, San Martín, y Villa Bonich.

La programación arrancará el próximo fin de semana y continuará durante todos los fines de semana de este mismo mes: el del 12, 13 y 14, el del 19, 20 y 21, y el de las 26, 27 y 28 de febrero (Ver más información).

Los vecinos de San Fernando también podrán disfrutar del 6to Desfile de Murgas, el próximo 21 de febrero, a partir de las 18 horas, cuando la Avenida Arnoldi -entre Pocitos y Cordero- se vistirá de Carnaval con la actuación de 14 murgas integrantes de la red. Este tradicional desfile se realiza en la ciudad desde 2005 y ya ha convocado a más de 8 mil vecinos que participan de estas jornadas en un ambiente familiar y de fiesta.

También en zona norte, se realizará el segundo festival de murgas y comparsas de Tigre que se llevará a cabo en el Polideportivo Central. El año pasado, ante más de 4 mil personas, vieron actuar a 10 comparsas y un espectacular desfile de carrozas.

En La Plata se volverán a escuchar los bombos de los murgueros en las plazas y el espíritu del rey momo gobernará en algunos corsos barriales. Al respecto, El diario "El Día" indica que "las celebraciones incluyen desfiles de comparsas, murgas y carrozas con grandes y pequeños disfrazados, además de muñecos y espectáculos artísticos. La clausura del Carnaval, en cada barrio, generalmente
es realizada junto con la elección de reina y princesa. Si bien la información sobre los corsos 2010 aún no fue confirmada, años anteriores estas celebraciones se llevaron a cabo en distintos barrios de la periferia, como Abasto, Olmos, Villa Elvira, Romero, Villa Elisa, Los Hornos, Arturo Segui, Las Quintas, y en Circunvalación, sobre la avenida 72".

En la Ciudad, el Carnaval porteño hará estragos: 112 murgas participarán en 30 corsos ubicados en Boedo, Villa Urquiza, Paternal, Villa Pueyrredón, Saavedra, Almagro, Lugano, Pompeya, San Telmo, Caballito, Villa Crespo, Mataderos, Liniers y Colegiales, los sábados 6, 13, 20 y 27 y domingos 7, 14, 21 y 28, además de los días feriados de Carnaval, lunes 15 y martes 16 de febrero.

Oveja negra

Lomas de Zamora quedó en off side al prohibir la realización de "Corsos y/o Bailes de Carnaval en todo el ámbito del Partido, mediante el decreto 67/10", suscripto por el intendente municipal Martín Insaurralde. La norma fue tomada a raíz de que, durante los últimos años, "algunas de estas celebraciones populares terminaron en graves incidentes y reclamos de los vecinos referidos a la higiene urbana y los ruidos molestos".

Entre sus considerandos, la norma señala que la realización de corsos y/o bailes en la vía pública "implica una mayor producción de residuos que obligarían al Estado a adoptar medidas extraordinarias para la preservación de la higiene pública", tales como la realización de operativos especiales de limpieza.

Por último, el decreto indica que no existen en el partido de Lomas de Zamora ámbitos apropiados para la realización de espectáculos de este tipo que satisfagan los recaudos necesarios.
l@s que estuvieron allí. Ese día se realizaron trabajos en grupo, cómo realizar pintadas y murales, en distintos lugares del barrio, grupalmente también se decidió cada palabra que se plasmaría en las paredes. Unas de ellas fueron: "Pocho vive en el corazón y en el rostro de los que piden justicia".

Estas fueron las primeras expresiones de este tipo en el barrio, luego del asesinato de Pocho. Desde entonces cada 27 de febrero Ludueña recuerda y celebra el cumpleaños de Pocho y a partir del 2003 con la realización del carnaval.
 

El carnaval de Mariano Moreno: con poco, un éxito




MARIANO MORENO (AZ).- Con el acompañamiento de murgas y comparsas de diferentes localidades de la zona, finalizó el ya clásico festejo del carnaval en esta loclidad que convocó a más de 5.000 personas.


La joven Aldana Molina de 16 años resultó electa como la nueva reina del carnaval en Mariano Moreno. La representante del cuerpo de Bomberos Voluntarios fue elegida en la noche del sábado donde se cerró el tradicional evento marianense. Guillermina Barrera (15) y Daina Valenzuela (15) fueron galardonadas como primera y segunda princesa, respectivamente.


"Estamos muy contentos por los excelentes resultados que arrojó esta edición del carnaval, sobretodo si se tiene en cuenta que se realizó con mínimas inversiones y que más que nada el éxito obedeció al esfuerzo y a las ganas de las áreas muncipales involucradas y de todos aquellos vecinos que quieren continuar con la mística de esta fiesta que allá por el año 1986 creara nuestro amigo
recientemente fallecido "Calipo" Funes", manifestó el intendente Juan Carlos Valenzuela.


Agregó además que "esta fiesta refleja que en este rincón neuquino hay demostraciones culturales que están a la altura de las grandes ciudades, por esta razón proseguiremos con esta fiesta y otras que hacen y que tienen que ver con nuestro acervo cultural".


De esta edición participaron las comparsas Ayelén Pilmayquen y la Agrupación Pichín Way de Mariano Moreno mientras que en representación de Zapala estuvieron Papelitos, Huircalef y Alma del Viento.


Un párrafo aparte se llevaron las actuaciones de las murgas Ilusiones de Senillosa, Remontando Ilusiones y Corazones Dorados de Plaza Huincul, Pateando contra el viento, Fastidiosos sin control, Sudaka, Estrellas callejeras y Remontando papelitos de Zapala.


Además se destacó la carroza "Homenaje al Tío Oso" de Mariano Moreno, en reconocimiento al antiguo poblador fallecido, Adrian Cabas, quien por largos años se encargó de elaborar carrozas que fueron un clásico de cada carnaval marianense.


En igual sentido la agrupación Pichin Way de Mariano Moreno se encargó de reconocer a uno de sus antiguos integrantes también fallecido, Juan Carlos Videla, lo que agregó una cuota de emotividad entre los asistentes.


Entre los disfraces se destacaron el personaje de "el zorro" del niño Lucio Agustín Funes y "la histórica vaca" de la agrupación Pichín Way.






Cuatro días de Tantanakuy


Por Gabriel Plaza




HUMAHUACA.- Todo está preparado para el carnaval. El próximo sábado se renueva la revancha contra el invasor español. Porque si bien la costumbre del carnaval fue introducida por los españoles, los pueblos andinos dieron vuelta su significado simbólico y a la presencia de la iglesia la impregnaron de la diablura y cosmogonía de los pueblos originarios. El desentierro del carnaval significa el desenfreno a lo largo de siete días. Para el quebradeño de a pie, es la válvula de escape, para afrontar los días por venir. Días de escape a la rutina, al silencio de las tardes, a la contravención de las instituciones.
Las mujeres y los hombres casados tienen piedra libre oficial para perderse por el cerro en estos días. Y, también, el carnaval habilita otro tipo de contravenciones porque después de una reglamentación provincial que clausuraba las puertas de los bailes a las cuatro de la mañana para mitigar el efecto alcohólico en la población, se decidió postergar la medida por el tiempo que dure el carnaval. Después todo volverá a la "normalidad". En ese clima el Tantanakuy llega a su edición treinta y dos, en sincronía con el efecto bicentenario, pero más impregnado por los aires carnavaleros que empiezan a sentirse por las calles. Desde su origen el encuentro que se realiza en la Quebrada de Humahuaca, abogó por la reunión entre los músicos. Tantanakuy es en quichua encuentro de unos con otros. Pero a la música, Jaime Torres uno de los impulsores junto a poetas como Jaime Dávalos y otros músicos regionales, le incorporó la reflexión alrededor de la identidad. En los últimos años, otra de las tónicas del encuentro es la mezcla de gente de diferentes orígenes y culturas. En esta edición se cruzarán por la Casa del Tantanakuy desde dibujantes como Crist a pensadores, artesanos y artistas tan variados como Mariana Baraj, Rubén Patagonia, Perla Aguirre, Arbolito, Melania Perez, Mario Bofill, Omar Moreno Palacios y una larga lista de artistas regionales que conforman una alternativa a los festivales folklóricos tal cual como lo conocemos, desde los jóvenes Bruno Arias y Humahuaca Trío a Tomás Lipán y Los Amigos de Ricardo Vilca.


Para estos cuatro días de encuentro, hasta el martes, en el complejo cultural de la Casa del Tantanakuy, la atmósfera previa de festejo acompaña. Serán jornadas de conciertos, charlas, talleres y películas. En paralelo, el pueblo marca su propio pulso y se embarca en la previa del carnaval, que sirve también de gancho para el turismo, con organización de bailes populares y otros encuentros bien auténticos como el que se desarrolla en las ruinas de Coctaca, a 8 kilómetros de la ciudad. Un espacio ritual de varias hectáreas que mantiene su virginidad y donde llegan campesinos para cantar y compartir la elaboración de chicha: otro punto para conocer lo ancestral, sin la contaminación del aluvión de gente que llega en temporada.


Los que se quedan en Humahuaca realizan el peregrinar habitual. A las 12, con celulares y cámaras, frente al monje tallado en madera que sale de la iglesia. A las 13, en un comedor regional o en lo de Fortunato Ramos. A las 14 de vuelta para su casa. Los que se quedan y zafan del city tour empiezan a desarrollar su top five de preguntas insólitas: ¿Dónde queda la quebrada?; ¿Dónde están los indios?; ¿Escuchan sólo folklore? A veces los turistas dejan la sensación de que se tomaron el avión o el ómnibus equivocados. La gente igual sigue su vida.


Cuando se camina por las calles, la influencia de los medios, en la forma de vestirse es tan clara como la cumbia o los hits de verano que se cuelan por los pasajes antiguos de piedra y adobe. Sin embargo, las raíces empujan. Los sonidos de sikus se esparcen por el aire. A pesar del calor, la gente se agolpa en los comederos para disfrutar del picante de pollo. Y el carnaval está en boca de todos. En pleno bicentenario, la búsqueda de la identidad sigue siendo algo latente en la región.




Tucumán: Los corsos barriales inician su maratón


El color y la música de las batucadas empezará a pasear esta noche por los barrios de la capital tucumana, con en el inicio del ciclo de corsos "Por un carnaval en familia", que organiza la Dirección de Familia y Desarrollo Comunitario municipal. Con la participación de 50 comparsas de distintos barrios, esta noche a las 20.30 el desfile se realizará por las calles de Villa 9 de Julio, en un recorrido que se organizó por las tres primeras cuadras de la calle Blas Parera. El año pasado, en esta zona se reunieron alrededor de 9.000 personas, según informaron los organizadores.


Que siga la fiesta


Los próximos encuentros murgueros se realizarán en el Complejo Muñoz (el sábado 13), en Martín Berho al 200 (viernes 19), en 9 de Julio al 1.800 de Villa Alem (sábado 27 de febrero), y en la Plazoleta Dorrego donde tendrá lugar el gran cierre del ciclo (domingo 28).


Al final de cada espectáculo se entregarán trofeos a las reinas infantiles, juveniles y mayores, y a las mejores comparsas, batucadas, murgas y pasistas. También se entregarán premios especiales a integrantes de comparsas discapacitados. Los asistentes pueden colaborar con alimentos no perecederos para los comedores barriales.




Se viene el noveno carnaval-cumpleaños de pocho


EL CARNAVAL DE POCHO: UN POCO DE HISTORIA


A principios del 2002 la murga de Los Trapos llegaba a su primer año de vida. El cumpleaños se celebró en el comedor "Betania" de Edgardo Montaldo , donde asistieron los niños murguistas junto a sus familias y los jóvenes que coordinaban en aquel momento la murga. En ese cumpleaños se comenzó a charlar y a pensar que actividad se podía llevar adelante en el barrio denunciando el asesinato de Pocho.


De esta forma salieron distintas propuestas, alguien recordó que se acercaba la fecha en que Pocho cumplía años, y se acordó que para entonces había que hacer algo. Así el 27/02/02 la plaza Pocho Lepratti de Ludueña, hasta ese momento conocida como plaza Mármol, fue el lugar o centro del encuentro. Jóvenes, niños, muchas mamás, los vecinos y otros que sin pertenecer al barrio se sumaron a las actividades propuestas para recordar a Pocho y denunciar su asesinato.

Un grupo de mujeres preparó tortas fritas que fueron compartidas con tod@s l@s que estuvieron allí. Ese día se realizaron trabajos en grupo, cómo realizar pintadas y murales, en distintos lugares del barrio, grupalmente también se decidió cada palabra que se plasmaría en las paredes. Unas de ellas fueron: "Pocho vive en el corazón y en el rostro de los que piden justicia".
Estas fueron las primeras expresiones de este tipo en el barrio, luego del asesinato de Pocho.
Desde entonces cada 27 de febrero Ludueña recuerda y celebra el cumpleaños de Pocho y a partir del 2003 con la realización del carnaval.

Comparte Molly de La Soberana Lusiférika de Santa Fe: "Al fin salieron los carnavales con el agua a los talones."



El viernes a la noche comenzaron los Carnavales entre Todos. Más de 7.000 personas disfrutaron de la actuación de siete agrupaciones. Hoy, desde las 20.30, será el turno de Yapeyú. El carnaval culminará el 21 de febrero, en la Santa Rosa de Lima. Organiza el Gobierno de la ciudad de Santa Fe.

En el año de la conmemoración de su centenario, Alto Verde fue el escenario donde este viernes por la noche se levantó el telón de la edición 2010 de los Carnavales entre Todos. Así, ante un impresionante marco compuesto por más de 7.000 espectadores, las fiestas carnestolendas organizadas por el Gobierno de la Ciudad comenzaron a desandar su vertiginoso trajinar por Santa Fe.

Pisando las 21 horas, por la extensa pasarela montada en la Manzana 2, frente a la delegación municipal, siete agrupaciones derrocharon la energía del carnaval. En este sentido, los protagonistas de la noche fueron Fantasía, La soberana Lusiferika, Los herederos del sol, Los nuevos payasos de Alto Verde, Picaflor, Flor del Litoral y Rosa dorada. Esta fiesta se enmarcó en la celebración de los 100 años de Alto Verde.

Hoy, Yapeyú

Esta noche, desde las 20.30 horas con entrada libe y gratuita, Yapeyú será el marco de la fiesta carnavalesca de Santa Fe. Puntualmente, las murgas derrocharán jolgorio desfilando por la Av. 12 de Octubre. Frente a la Vecinal Ceferino Namuncurá (12 de Octubre y Chaco) se desfilarán Flor de Irupé, Los dioses santafesinos, Ivotí, Los payasos de Pichulo,Los principitos, Saltarines y carasucias, Seguimos payasos, Rosa dorada y Los príncipes de Momo.

El domingo, en tanto, la fiesta se trasladará a la Costanera Este. También a las 20.30 horas, actuarán de las mejores agrupaciones de carnaval con que nuestra ciudad cuenta; de esta manera, se presentarán 29 de Abril, Eclipse,Flor de Irupé, Flor del Litoral, Kambanyé, Litoral Samba Show, Los auténticos tesoros de Monzón, Los nuevos payasos de Alto Verde, Marí Verá, Marimba, Pombagira, Santa Fe Cordial y Alí Babá. La entrada costará 10 pesos; los menores de 12 años ingresarán gratis.

Hasta el fin

El cronograma de Carnavales entre Todos continuará el próximo fin de semana. Recordemos que por las inclemencias climáticas que afectaron a nuestra región, la Secretaría de Cultura del Gobierno de la Ciudad decidió reprogramar los Carnavales entre Todos previstos la semana pasada. Así, Av. Gorriti, La Guardia y Santa Rosa de Lima serán las sedes de los festejos del viernes 19, sábado 20 y domingo 21, respectivamente.

 

"Un solo grito, dictadura nunca más"
A propuesta de Madres, murgas locales y del exterior le pondrán música, vida y color al espacio donde funcionó la ESMA.
"Buscamos ponerle más vida a un lugar en el que hubo tanto dolor y tanta muerte." En palabras de María de los Angeles Ledesma, coordinadora del área de música del Espacio Cultural Nuestros Hijos (ECuHNi, Avenida del Libertador 8465), ése es el espíritu del carnaval que comienza esta noche donde en plena dictadura funcionó la ESMA. Con diversas actividades vinculadas al arte, es lo que viene sucediendo desde abril de 2008, cuando las Madres desembarcaron allí para exorcizar el dolor. La murga, con su color y alegría, lleva ese objetivo a la máxima expresión. "Fue una propuesta directa de las Madres, que siempre pensaron en llenar este espacio de vida y de amor. Desde aquí se prohibió el carnaval en los '70. Por eso es que es muy emblemático", explicó Ledesma a Página/12. "Ellas sienten que somos sus hijos y llenar este lugar de luz es una manera de devolverles un poco lo que nos dieron."

Es el segundo año de carnaval en el ECuHNi, aunque en esta oportunidad la grilla es más completa. Todo es con entrada gratuita. Hoy a las 20.30 actuará un grupo de murgueros llegados de Bélgica junto con el coro La Matraca, bajo la dirección de Coco Romero. Mañana la movida comienza temprano, a las 16, con la proyección de la película Blanco y carmín, la murga según Pasión Quemera, de Paula Horman y Daniel Vidal, una indagación sobre la cotidianidad del grupo. A las 17, tamboreros y bailarines que respondieron a una convocatoria abierta se presentarán bajo la dirección de Diego Cueto. Los sigue el tradicional desfile murguero con la presencia de Pasión Quemera, La Contracara Murga y Los Verdes de Monserrat. Se espera que, de todos modos, se integren todas las murgas que así lo deseen. Finalmente, este año también incluye teatro, con el último espectáculo de Pompapetriyasos, grupo comunitario de Parque Patricios.

El año pasado la propuesta superó todas las expectativas, y eso que se promovió "tímidamente". "Fue una sorpresa. Habíamos empezado a convocar murgas y todas estaban afectadas al festejo del Gobierno de la Ciudad, que les había pagado un subsidio. Entonces pensamos que no iban a venir. Pero de pronto había seis agrupaciones en la vereda", recuerda Ledesma. "Se habían autoconvocado. Vinieron alrededor de 600 murguistas. Cuando recién comenzábamos, la gente no entendía bien si el ECuHNi era de Madres o de Nación, privado o estatal. Por eso, cuando los murguistas se enteraron de que era de Madres, se movilizaron de tal manera que vinieron sin invitación. Fue hermoso, una alegría."

En la programación de este año, la presencia de murgas belgas es un capítulo destacado. "Nos pareció fantástico que se sumen a esta movida, porque sus integrantes están interesados en la cuestión cultural de las murgas." Quien promovió el fenómeno que comenzó en Amberes fue el argentino Enrique Noviello, director de Los Murginales. Bien lejos del Río de la Plata ya hay una docena de murgas, cada una con sus particularidades. Sus representantes llegaron a Buenos Aires para intercambiar experiencias con los locales, y de esos encuentros nació el espectáculo que se verá el sábado: una suerte de competencia por imponer qué es una murga, un diálogo humorístico entre belgas y porteños. "Ellos vienen con sus trajes que no tienen nada que ver con los nuestros. Son de hadas o de duendes", cuenta Ledesma. Actuarán miembros de L'amour Gaga, la murga del amor; Fata Murgana, que incluye danza del vientre; y Sentimiento Verde, unión de elementos africanos y brasileños, entre otras.

Por otro lado, "Los tambores no callan", el show de tamboreros y bailarines, intenta ser un reflejo de "la Argentina negra del 1800". Acerca del desfile de murgas, Martín Merlino, de Pasión Quemera, cuenta que "se mezclan todos los grupos y después cada uno sube al escenario". También salen a la vereda, claro.

Oriunda de Parque Patricios, la agrupación siempre se mantuvo cerca de los organismos de derechos humanos. La actuación del año pasado en el ECuHNi fue el corolario de esa vinculación. "Fue una situación particular estar bailando ahí, en un lugar con esa historia atrás. Todo lo negativo se transformó en energía positiva", recordó, en consonancia con la visión que tiene Ledesma sobre el acontecimiento.

"Por Patricios suena un bombo/ que retumba en Monserrat/ y en su canto hay un solo grito/ dictadura nunca más", dice la canción "Murgas del sur", creación conjunta de Pasión Quemera, Los Verdes de Monserrat y Los Amantes de la Boca. Al ritmo del bombo y platillo, el año pasado la entonaron arriba del escenario, y este año también lo harán. Es que la relación entre murga y dictadura fue de lo más difícil. Por poner un ejemplo concreto entre tanta atrocidad, el proceso militar eliminó mediante un decreto el feriado de lunes y martes para los festejos de carnaval. Junto con otros colectivos, Pasión Quemera está en la lucha por su restitución. Para Merlino, la actuación en el ECuHNi es una manera más de concientizar a los más chicos de lo que pasó en los años de plomo. Es lo que hacen habitualmente, "con documentos, sesiones de cine o cosas para leer".

El film que los tiene como protagonistas es una puerta de entrada a "la cocina de la murga" con sus ensayos, charlas y discusiones. "Una pequeña historia de distintas visiones que hay dentro de un grupo de gente sobre la política, por ejemplo", describió Merlino. Como algunos murguistas tienen familiares desaparecidos, la dictadura es un tema que asoma. "Cada persona que entra en la murga tendrá una referencia sobre lo que pasó. Nos ayuda a instalarlo, aunque es difícil que los pibes se interesen", destacó quien fundó el grupo hace quince años, con algunos amigos del barrio.
Informe: María Daniela Yaccar.