domingo, 8 de marzo de 2009



TODAS LAS VOCES POR UN MISMO CLAMOR


¡¡¡DEVUELVAN EL FERIADO DE CARNAVAL!!!





Compilación y edición de Pupita La Mocuda


LUNES 23 DE FEBRERO - MARCHA DESDE PLAZA CONGRESO A PLAZA DE MAYO
DECLARACION DEL ESPACIO DE MURGAS INDEPENDIENTES
¡¡Marchemos todos por el feriado de carnaval!!

En Junio de 1976, durante la dictadura militar, se impuso la ley 21.329, que prohíbe que los días lunes y martes de carnaval sean feriados, como lo eran hasta ese entonces. Actualmente en muchos municipios de la provincia de BuenosAires, el carnaval está prohibido, la policía no permite que se realicen corsos y hasta reprime ensayos de murgas en espacios públicos. Muchas murgas, para poder realizar corsos deben evitar mencionar esa palabra promocionándolo como "encuentro de murgas".
Por la recuperación de parte de nuestra cultura, y por nuestro derecho a poder realizar actividades culturales en lavía publica, de manera independiente y autónoma, es que hoy nos movilizamos......
Por corsos libres y gratuitos en todos los barrios de todo el país...
No a la represión al arte popular...
El carnaval es patrimonio cultural nacional...
Memoria y Justicia por Daniel Gómez, Pedro Ojeda, Pablo González,Murgueros mendocinos atropellados y asesinados durante un festival en 1999.
Por Rodrigo Corso, y todos los murgueros asesinados, ¡PRESENTES!
Febrero de 2009

MARTES 24 DE FEBRERO - MARCHA DESDE CALLAO Y CORRIENTES HASTA EL OBELISCO.
DECLARACION DE LA ASOCIACION CIVIL M.U.R.G.A.S.
POR EL FERIADO NACIONAL DE CARNAVAL

Pedido de restitución del feriado nacional de lunes y martes de carnaval.
Pedido de derogación del decreto militar que en junio de 1976 quitó del calendario argentino la tradicional fiesta de carnaval.
Que se declare patrimonio cultural de la nación a las agrupaciones de carnaval que recrean los géneros típicos de cada región.
Las agrupaciones de carnaval de la ciudad de Buenos Aires, del conurbano bonaerense y del interior del país reclamamos que se restituya el tradicionalferiado de lunes y martes de carnaval a nivel nacional.Reclamamos la derogación del decreto 21329 (9-6-76) de la última dictadura militar que anuló los feriados carnavaleros del calendario argentino y desde entonces, a lo largo de estos casi 26 años de democracia, no volvió a incluirse. Por el contrario, sigue aún vigente este decreto de la época másoscura de nuestro país, en que no les alcanzó con el genocidio, sino que ademásintentaron robarnos la alegría. Y en esta oportunidad en que volvemos a reclamarla derogación de ese decreto antipopular, se cumplen casi 33 años de aquel negro marzo de 1976. Nuestro reclamo se sustenta en la necesidad de rescatar la memoria y laidentidad popular que sucesivos gobiernos autoritarios pretendieron sumir en elolvido.Se sustenta en la necesidad de rescatar el festejo y la alegría del carnaval como patrimonio cultural de nuestro pueblo. Se sustenta también en el quehacer de miles de artistas populares del carnaval ue son la expresión de esa tradición y de nuevas inquietudes artísticas.
Entendemos al carnaval y a todas las actividades de preparación del festejo como un espacio de alegría, de contención social, de expresión y creación para miles de niños, jóvenes y adultos que encuentran aquí un lugar de pertenencia, una construcción propia.Entendemos al festejo del carnaval como un derecho porque es parte de nuestrahistoria, en donde las modalidades regionales conforman la diversidad cultural de nuestro país. Por eso, pedimos el respeto a esas diferentes modalidades de festejo.Esas diferentes expresiones que recorren nuestro país es lo que nos enriquece ynos ofrece una variedad de escenarios que necesitan tener las condiciones para desplegarse y atraer a nuestro público argentino y a los turistas que recorren en febrero nuestro país.
Buenos Aires, Febrero de 2009









DESFILES DESDE PLAZA CONGRESO A PLAZA DE MAYO
Las murgas, por la vuelta de los feriados de Carnaval
Ayer marcharon las independientes y hoy las oficiales para que haya asueto nacional
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Ritmo, trajes de colores, baile y percusión. Las murgas porteñas independientes salieron a la calle ayer por la tarde a festejar elCarnaval. El desfile comenzó a las 18:3o y más de 50 murgas y alrededor de 1.500 personas partieron de Plaza Congreso para llegar hasta laPlaza de Mayo. El espectáculo se repetirá esta tarde cuando las agrupaciones del circuito oficial se junten a las 17.30 en Callao yCorrientes y desfilen hasta el Obelisco.No sólo del corso vive el murguero. Esta fue también una oportunidadpara reclamar lo que tanto las murgas independientes como las delcircuito oficial consideran justo: que se vuelva a instaurar el lunes y martes de carnaval como feriado nacional. En la Ciudad de BuenosAires, estos son días no laborables para los empleados públicos otravez desde el año 2004. "El asueto que se dio en la Ciudad es unprimer paso, pero vamos por más. Creemos que el feriado nacional sepuede y se debe instalar como antes", dijo Diego Santonovich, integrante de la murga "Cachengue y Sudor" y uno de los organizadores del desfile de ayer.Hasta 1976, los lunes y martes de carnaval eran feriados en todo elpaís. Tres meses después de haber asumido, en junio de 1976, la JuntaMilitar impuso la ley 21.329, que eliminó los feriados de carnaval del calendario.
"Entendemos la murga y el carnaval como algo popular. Para nosotros estos días tienen un sentido festivo", explicó Diego Santonovich. Por eso, la convocatoria de ayer y de esta tarde está abierta a todo elpúblico, no sólo a la comunidad murguera. Por eso también es queayer, las 50 murgas reclamaron por que los festejos de carnaval sean libres y gratuitos en todo el país. "En el interior muchos corsos son privados y la gente que no tiene para pagar la entrada no los puede disfrutar", contó Santonovich y agregó, "mientras desfilemos le vamos a entregar nuestro petitorio al público para que sepa quéreclamamos". Los festejos contaron con la presencia de murgastradicionales como "Pasión Quemera", de Patricios, "Despilfarrados",de Colegiales y "Los Guardianes de Mugica", de Retiro.
La época de gloria de las murgas porteñas se puede ubicar en lasdécadas del 50 y del 60. En ese momento nacieron y se consolidaron algunas de las más famosas y reconocidas, que incluso hoy, muchosaños después, todavía se encuentran en actividad, como "Los Pegotesde Florida", murgueros desde 1925. A mediados de los años 90 las murgas volvieron a la actividad, y, con ellas, los desfiles de carnaval por las calles y avenidas de la Ciudad. Desde 1998, eldesarrollo de las asociaciones siempre fue creciente y ante los 12corsos que se contaron ese año en la Ciudad, hoy ya se superan los 40.
Fuente: http://www.clarin.com/diario/2009/02/24/laciudad/h-01864927.htm

MARCHAN Y BAILAN POR EL CENTRO PORTEñO
Los murgueros vuelven a reclamar por los feriados de carnaval
Unos 4.000 integrantes de más de 60 murgas porteñas marcharon por el centro de la ciudad de Buenos Aires para reclamar la restitución del feriado de carnaval anivel nacional, anulado en 1976 por un decreto de la dictadura militar. La protesta culmina con un gran baile en el Obelisco.
La marcha, la decimotercera que se realiza en forma ininterrumpida, partió de Callao y Corrientes y culmina en el Obelisco, donde se realizó un gran baile,con los movimientos y saltos al aire que caracterizan este género típico delcarnaval porteño."Por la restitución del feriado nacional de lunes y martes de carnaval. Por laderogación del decreto militar que en 1976 quitó del calendario argentino la tradicional fiesta de carnaval", fueron los ejes centrales de la marcha convocada por la Agrupación Murgas, que agrupa a gran cantidad de estas organizaciones.
Otro reclamo era que "se declare patrimonio cultural de la Nación a lasagrupaciones de carnaval que recrean los géneros típicos de cada región y que los corsos sean libres y gratuitos en todo el país", señaló una fuente de la organización.
La marcha estuvo encabezada por estandartes fileteados y bordados en lentejuelas y participaron, entre otras, las murgas Gloriosa de Boedo, Alucinados de Parque Patricios, los Amantes de la Boca, los Chiflados de Boedo, Los Girosos dePompeya, Estrellados Porteños y Portadores de Alegría.Los feriados de carnaval fueron anulados en todo el país por el decreto 21.329del 9 de junio de 1976 y, "a poco de cumplirse 26 años de democraciaininterrumpida, sigue aún vigente", advierten los murgueros en una declaración.
El texto destaca que durante los últimos años "tuvimos el apoyo de diputados yfuncionarios del Poder Ejecutivo, pero el decreto militar sigue vigente y la leydel feriado no se votó". En la ciudad de Buenos Aires rige el feriado de lunes y martes de carnaval desdeel 2004, por la ley 1322 como días no laborables para empleados de esaadministración, y además las murgas fueron declaradas por la legislatura porteñapatrimonio cultural de la ciudad.
Fuente: http://www.pagina12.com.ar/diario/ultimas/20-120482-2009-02-24.html

MARTES 25 DE FEBRERO - MARCHA EN LONGCHAMPS
CONVOCATORIA DE LA MURGA PUERTAS ABIERTAS, MURGA DE LOS MONCHOS, COMPARSA AL BORDE Y GRUPO LA VIEJA DEL ANDEN

Un carnaval para todos
/¿Por qué?/
Porque en estos tiempos en donde cualquier espectáculo se cobra, apostamos y creemos en un carnaval gratuito, familiar, alegre, como losde antes, en donde la familia se reunía, jugaba con agua, iba a losclubes donde desfilaban murgas, comparsas y se armaba el baile. No es por nostalgia que lo hacemos, no. Ni creemos en ese dicho "todo tiempo pasado, fue mejor", porque creerlo seria resignarnos a no mejorar elpresente y no proyectar un futuro mejor.
No nos gusta esto que nos toca vivir, una sociedad cada vez masindividualista, donde la alternativa para los niños y adolescentes estener un celular ultimo modelo, o no tenerlo. Usted se preguntara /¿se puede cambiar esto con el carnaval?/ Pues con el carnaval solo no; pero hay mucho que se comparte al organizarlo: cuando nos juntamos en el barrio varios meses antes, surge lo mejor de todos, y "uno" se convierte en "nosotros". Desde lo mas pequeño y sencillo se siente el compartir,el ser solidario, el ser alegres en la critica.Ante la miseria impuesta, la alegría es sinónimo de lucha. Y asíluchando, nos inventamos con nuestras manos esta fiesta donde entramos"/todos"/ y "/todos"/ lo hacemos: el baile, la decoración del lugar; todo se converso, se consensúo para brindarles un espectáculo dondenadie quede afuera, para contagiar estas ganas y así, empecemos aconstruir una sociedad solidaria y mas justa.



"Les dejamos nuestros versos


Con su música prestada


Les dejamos el cariño


La esperanza de una mañana;


Si logramos su sonrisa


O se han puesto a meditar


No lo tomen muy en serio


Que estamos en carnaval,


"Ahí va la bocha señores";


No se puede ir del todo,


Porque seguiremos juntos


Luchando codo con codo


En el trabajo, en la calle


De un pueblo que todos quieren


Y cuando la murga es pueblo


La murga nunca se muere."





LA DESDICHA POSESA DE UNA PROHIBICIÓN: ATLETAS DE DESGRACIAS
Texto de Graciela Serra con fecha del 22 de febrero de 2009

Los hechos cantan, los deshilachados narran.
Una y otra vez salió a las calles el desgraciado de todos los fascistas a calumniar al pueblo que a nadie molesta cantándole sumemoria y su bailar en la oreja. Narra un deliberado nazi. Un soberbio y fascineroso indio hijo de su madre "que andaría con elculo al aire si no lo cubriera la capa"(*) de su pestilente honradoturno de fácil funcionario.
Hasta puede ser un juez el que subraya desde su oligárquico y enfermodiario virtual que le molestan los murgueros.
El silbato lo enferma, la calle lo envenena, la murga le desagota loshuevos, los negros le desafilan los dientes, los sospechosos lo dejanclavado a la cruz de dios haciendo el amor entre los pajonales y lacruz en la iglesia nada le calma, si entramos a saber que seguro lleva más de dos amantes murgueras que lo dejaron con el calor entrelas piernas y le dijeron sos medio impotente. Se burlamos de los impotentes se burlamos.
Salir a firmar casi como "Yon Waine", aquel extremado actornorteamericano co-fundador junto a Frank Sinatra, Elia Kazan, y elgarito completo del clan Sinatra, del afamadísimo KLUX KLUX KLAN, demoníaco tribal canallesco americano desfilando calles de New York en el movimiento más cabal del odio negro. Odio fascista. Odio norteamericano. Odio histórico.
John Wayne filmaba bajo la estricta condición de no entrar al rodajecon un negro, y si le tocaba la increíble y fatídica desgracia, lohacía vestido de matón, lidiando en la idea de matarlo, y le dejaba la cara marcada de dedos deliberadamente, o le daba la mano forradade guantes, en el caso que desde el pesonaje tuviera que saludarlo. No se fuera a manchar.
Fascistas hay que inventan diarios liberales on-line y jamás darían la cara a un público virtuoso que les estaría dado ser reconocidos ynada hay peor que luego tener que retractarse.Una prohibición dió por el piso con un corso menos y otro pulguiento canalla escondido. Nada peor. Y los demás a clavarse esta dictadura de libertades. O no somos esto: libres del sur.
Y quienes dudan de una marcha de reclamos dudan hasta de su nombre y apellido y a qué viene tener que tenerles tanta milonga, continuar y dar otro paso adelante.
Dos prohibidos sacan de circulación lineal dentro de la algarabía social dos décadas más de celebrar la armonía del alma. Son solamente cuatro noches y más prohibidos. Les canta un fracaso, en eso andamos gobierno nacional, les canta otro enorme fracaso. Y vienen dos más, que son los corsos de Macri, aligeren la busarda, aligeren, que ya pronto se va.
Faltaba más que nos vamos a callar y no vamos a reclamar el feriado, somos gente, no somos perros de custodia del reino del nunca más.
Reine murga, reine más aún, le molesta al entre. Fácil es opinar ydificilísimo es hacerlo. Parodiarlo. Tenerle el frente. Sacarlo. Meterlo adelante, cuidar el atrás. Hay asco en el social comentario, hoy la gente no la quiere poner, en ninguno de los dos sexos.
De dientes en dientes, leí bien que somos basura, quienes denostan mi casa país, denigran mi vida privada. El alma les llegue al infierno y se mueran mañana. No son necesarios acá.Y de modo altruísta y generoso, quiero denigrar a todas sus mujeres, las que arrugan si les pega un militar y llegan a sus camas con ellos, a sentir el peligro de la derrota y jamás a enterarse de la alegría de la bondad: sensaciones de piel que nunca les dará risas.
Pobres de todos nosotros, prohibidos y silenciados. Pobres de los aquellos que siendo tan pobres siempre pretenden el lugar del poder.
Siempre serán explotados.
Nunca dejes, mi amor, tu especial tacto en la armonía. Serás un hombre feliz, hijo, siendo siempre libre. Como un pájaro. Y libre. Estamos muy jodidos, y no hay quien se aguante canalladas.
(*) Galeano, Eduardo.
http://www.fotolog.com/graciela_serra
http://www.proyectoazul.com.ar/
http://www.fotolog.com/la_eutonia



El carnaval, un festejo prohibido



Por Ramiro de Los Guardianes de Mugica




Esta tarde, como en los últimos años, las murgas independientes van a marchar de Congreso a Plaza de Mayo por la recuperación del feriado de carnaval. También se realizarán movilizaciones similares en diversos puntos del país exigiendo la derogación del decreto decreto 21329/76, entre otras consignas que apuntan a la recuperación del carnaval, una fiesta popular milenaria cuya historia vale la pena empezar a conocer.

Uno de los tradicionales festejos universales más antiguos de la historia de la humanidad, persiste hoy, a pesar de las prohibiciones y ataques de parte de las autoridades. Desde las antiguas leyendas del dios momo expulsado del olimpo por sus burlas hacia lo establecido. Desde los incontrolables festejos en la edad media y sus ataques a los monarcas. El carnaval tiene sus distintas versiones y tradiciones adaptadas a sus poblaciones originarias y también migrantes. En distintas partes del planeta también atraviesa distintas resignificaciones, algunas completamente contaminadas por el mercado y vaciadas de contenido, en otros casos, solo parcialmente y también en otros se sigue luchando por mantener o recuperar esta tradición de crítica y expresión popular.
Esta nota no va a promocionar viajes turísticos a espectáculos comerciales, ni a mostrar exuberantes cuerpos emplumados bailando sobre ostentosos carruajes. Simplemente es una breve reseña para conocer solo una muy pequeña parte de esta tradición con miles de años de historia, y concentrada en nuestro territorio. Es que hoy y mañana no se debería trabajar como cualquier día hábil, ya que es carnaval y los lunes y martes de esta semana, 40 días antes de semana santa, deberían ser feriados, lo que supone, además de la censura a los festejos, un abuso a todas las trabajadoras y trabajadores de este país (salvo los empleados del gobierno de la ciudad, que gozan de un “asueto”, que igualmente puede ser derogado en cualquier momento por el gobierno macrista, el mismo que lo impulsó como medida demagógica hace 5 años, desde sus legisladores durante el gobierno de Ibarra), con algunas gratas excepciones como Jujuy, y algún municipio aislado en el interior de la provincia de Buenos Aires, en donde se respetan los feriados.
Hay una enorme y rica historia de los carnavales en Latinoamérica, que resultaría imposible contar en un artículo, también en el Río de La Plata. El carnaval rioplatense está muy ligado al candombe y a la murga (tanto en su versión argentina como en la uruguaya), con influencias negras y europeas. En el interior de Argentina están muy presentes tradiciones folclóricas originarias, que desde las migraciones, se han hecho presentes también en Buenos Aires.
Algunas tradiciones rioplatenses cuentan con elementos de la época colonial, en donde la historia se mezcla con las leyendas, vinculadas a los esclavos y sus momentos de recreación, en donde lo tribal se mezcla con la crítica y la burla hacia sus amos. En las murgas porteñas, están presentes en los trajes de raso, cuya leyenda recuerda a negros esclavos que utilizaban las levitas de sus amos pero al revés exhibiendo el raso que esos trajes tenían en su interior. Sus pasos de baile recrean distintas situaciones: algunos pasos simulan en andar encadenado de los esclavos, los tres saltos (3 por los 30 latigazos, un castigo muy común en aquel entonces), el intento de sacarse las cadenas, y la matanza, el momento de mayor liberación. Los maquillajes y las máscaras, presentes en ambas orillas del Río de La Plata y en muchas otras partes del mundo, mas allá de lo pintoresco, representan y recuerdan a aquellos festejos en donde los esclavos, en esos pequeños momentos de libertad, ocultaban sus rostros detrás de los maquillajes para poder criticar a los poderosos y sin ser reconocidos y evitar posteriores castigos.
En el año 1871, ante una epidemia de fiebre amarilla que tuvo lugar en ese entonces, el diario “La Nación” en su edición del 11 de febrero de ese año alertaba que “Las comparsas se habían convertido en procesiones fúnebres y el pueblo aterrado huía de la ciudad, que parecía conducida a un total exterminio”. A partir de esta terrible epidemia se incorporó a las murgas, como símbolo de la oleada de muerte, la representación de la muerte objetivada en la figura de la calavera con la daga.




La intervención estatal y comercial como elemento de dominación




Existen numerosas estrategias de cada gobierno para controlar y “permitir” el festejo, de eclosión de emociones. Algunos de ellos están documentados en diversos documentos oficiales (edictos policiales, crónicas periodísticas y solicitadas públicas) que, pueden demostrar la voluntad de los diferentes gobiernos de cada época, de controlar, pero también de sancionar esos festejos restringiendo la subversión del orden durante unos días para que permanezca vigente el orden los demás días del año. Una tradición de control y sanción por parte de las autoridades, que acompaña a estos festejos desde la Grecia antigua y ha contado con su versión local en el Río de la Plata en distintos momentos de la historia. Ya en 1770 durante el Virreinato del Río de La Plata, los carnavales ya eran foco de la atención oficial, dado que se trataba de festividades protagonizadas principalmente por los negros esclavos. Estas fiestas eran consideradas “escandalosas”, groseras, desenfrenadas; por lo tanto el Virrey Vértiz, quien detentaba en ese entonces el Gobierno de Buenos Aires, promulgó un bando por el cual establecía la prohibición de dichos festejos, con un castigo de 200 latigazos a quien intente llevarlas a cabo mediante “los bailes y toques de tambor”. El carnaval fue proscripto mediante dos órdenes reales de Carlos III, el 7 y 14 de enero de 1773, alegando que nunca “habían sido permitidos, y que debería dominarse el “escandaloso desarreglo de costumbres” que se estaba produciendo en la ciudad de Buenos Aires, gracias a los festejos carnavalescos.
Sin embargo, ya en ese entonces se aplicaban distintos dispositivos de control que no se limitaban solo a la prohibición y represión. “La Ranchería”, es un galpón de madera y paja inaugurado en 1783, en un principio para exponer obras teatrales, en la actual esquina de Perú y Alsina, en dónde posteriormente se realizaron bailes de carnaval luego de que Vértiz los autorizara nuevamente, algunos argumentos para justificar dicha autorización están ligadas a “poder controlar dichos festejos”. En la época del virreinato los carnavales fueron foco de atención de los distintos actores de la escena del poder en esos días. Por un lado, se convirtieron en un objeto de interés en la puja por el poder entre la corona y el Virreinato; por otro, se transformaron en “un ámbito de disciplinamiento de las almas y los cuerpos”.
Actualmente, también existe esta doble modalidad, en donde se combinan las prohibiciones directas con los controles y sanciones parciales, así como también los intentos de “cooptación” de dicho festejo por parte de punteros políticos y gobernantes. Desde el primer corsos en Buenos Aires, que tuvo lugar en 1869, en la calle Hipólito Irigoyen, entre Bernado de Irigoyen y Luís Sáenz Peña, existieron numerosas situaciones de festejos, controles, prohibiciones y permisos entregados con intenciones de obtener “réditos políticos”. Previo a ese corso, y a la creación de la primer comparsa en 1858, durante el Gobierno de Juan Manuel de Rosas, el carnaval había sido nuevamente prohibido el 22 de febrero de 1844. Las celebraciones se reanudaron recién en 1854, con Rosas fuera del poder. Pero el carnaval volvió muy reglamentado, se realizaban bailes públicos en diversos lugares, previo permiso de la policía. Había mucha vigilancia policial para prevenir los desmanes de las décadas anteriores.
Por otra parte existen en documentos referentes a la “Campaña al Desierto” menciones respecto al carnaval: Una nota del Diario La Nación, en 1872, revelaba el desvelo del Gobierno de la Provincia Y la Jefatura de Policía por el anuncio de una comparsa que se proponía representar la Expedición al Desierto. Las “súplicas” de la policía a los jóvenes de la comparsa hicieron que se desistiera del proyecto: “...Parece que la seriedad de la expedición al desierto iba a ser defendida, mejor que la frontera, en las calles de la ciudad y se temía una conflicto. En consecuencia, la comparsa “Expedición al Desierto” se ha disuelto; y queda allanada la cuestión de estado y el conflicto que tenía por base una broma de carnaval...” (Puccia: “Historia del carnaval porteño”)
Durante el siglo XX existieron numerosas prohibiciones que lastimaron la historia y la tradición del carnaval porteño. La última y aún vigente prohibición es el decreto 21329/76, en el que se prohíben los feriados de carnaval y que actualmente sirve de excusa a numerosos gobiernos locales en distintas partes del país para prohibir corsos e impedir que se realicen festejos, y en algunos casos, ensayos de murgas en espacios públicos. Dicho decreto fue implementado en 1976, durante la última dictadura militar.

Murgas y comparsas, algunas diferencias




Entre finales del siglo XIX y las primeras décadas de 1900, los corsos alcanzaron su máxima popularidad, pero a partir de 1915 las comparsas comenzaron a desaparecer, dejando lugar las murgas, con características diferenciadas en el tipo de música y formas de manifestación, siendo más grotescas, críticas y picarescas. Por aquellos años, a principios de 1900 se daban los bailes de los conventillos, que eran legión en Buenos Aires, muchas veces terminando a tiros o puñaladas, pero la mayoría de ellas festejados con mucha alegría y camaradería.
A diferencia de las comparsas, las murgas apelan de modo desafiante al grotesco. Las comparsas en cambio tenían influencias europeas y eran bandas de músicos con alto dominio técnico y muchos coros e instrumentos. Las murgas también son el resultado de la mezcla de tradiciones que se dio con la gran inmigración. Antes las agrupaciones carnavalescas se fundaron en fuertes lazos étnicos, de clase y amistad. Con el tiempo se fueron organizando a partir del encuentro e intercambio vecinal de los barrios. Los carnavales fueron mantenidos como fiesta pública por entidades que se organizaron en función de lazos de vecindad y territorio, que es la forma que todavía se encuentra en nuestros días.
Actualmente las murgas y las comparsas, en Buenos Aires, se diferencias, no solo por la vestimenta, el estilo de baile, y los instrumentos de percusión (siendo el Bombo con platillo un instrumento particularmente de la murga porteña), sino también por la importancia del escenario desde donde se entonan canciones, se recitan glosas, y en algunos casos se realizan representaciones teatrales.
El movimiento Nacional de Murgas y la lucha por la recuperación del carnaval

Durante los años 90, empezó a resurgir el carnaval, y reaparecieron las murgas, que fueron creciendo en los últimos 15 años. A fines de los años 90 tuvieron lugar las primeras marchas por el feriado de carnaval. El crecimiento de estas movilizaciones así como la multiplicación de las murgas, que se iban creando y reproduciendo cada año en los barrios generó los primero reconocimientos institucionales, lográndose que en 1997 sean reconocidas como “patrimonio cultural” en Buenos Aires; poco tiempo después se logró que el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires destine parte de su presupuesto para dichos festejos. Pero no todo fue gratuito feliz: el feriado de carnaval aún no se ha logrado y el decreto 21329/76 sigue vigente. Además dicho presupuesto no fue administrado equitativamente y sirvió como herramienta de control y disciplinamiento a las murgas. El presupuesto llegó a cambio de reglamentaciones y exclusiones que la Agrupación M.U.R.G.A.S, en ese entonces la única organización existente, aceptó sin cuestionamientos, excluyendo, en primer instancia a las murgas de provincia a participar de dichos festejos. Luego, al seguir creciendo la cantidad de murgas, se crearon las evaluaciones para las cuales sólo las murgas que logren el puntaje necesario, puedan seguir participando. Dichos reglamentos son siempre cuestionados y en muchas ocasiones difieren incluso de los documentos históricos sobre los festejos tradicionales de carnaval en los cuales dicen fundamentarse. Esto generó que distintas murgas se vayan abriendo de dicha organización y empiecen a juntarse con las murgas de la provincia o con otras murgas que el sistema de evaluaciones había excluido.
En diciembre de 2004, se empieza a gestar el primer circuito independiente de corsos en Gran Buenos Aires, que articulaba algunos corsos de la capital con muchos otros del conurbano, casi todos estos realizados por murgas de manera independiente, por fuera del circuito oficial de Capital Federal. Ese fue el principio del Movimiento de Murgas independientes de Gran Buenos Aires, que realizó su primer circuito independiente en el carnaval del 2005, año en el que empezaron a marchar de manera independiente reclamando el feriado de carnaval. A diferencia de la Agrupación M.U.R.G.A.S, que suelen marchar el martes de carnaval, las Murgas Independientes marchan el día lunes. Es importante aclarar que muchos de esos corsos independientes se venían realizando anteriormente y que en algunas partes del conurbano existieron algunas experiencias de agrupamiento independiente de murgas, una de ellas fue el MIO (Murgas Independientes del Oeste) que llegó a reunir a decenas de murgas de la zona oeste, casi todas ellas actualmente forman parte de Murgas Independientes.
Si bien se están intentando generar, y de hecho existen algunos canales de diálogo entre ambas organizaciones, algunas de las diferencias entre Murgas Independientes y la Agrupación M.U.R.G.A.S tienen que ver con la exigencia de Murgas Independientes de construir a nivel mas nacional (es decir no limitarse a la Capital Federal) y generar un carnaval que no excluya, además de privilegiar la libre expresión y el compromiso social por sobre intereses comerciales como la explotación del carnaval desde el turismo y su comercialización. Otros probelmas que solamente Murgas Independientes considera importantes son: la represión y prohibición de corsos en algunos partidos de conurbano; el hostigamiento a murgas independientes tanto en sus corsos como en ensayos; el enrejado de plazas en las que se realizan corsos durante el carnaval como ocurrió en la plaza 24 de septiembre cercana al Cid Campeador, donde hace años venia ensyando y realizando corsos la murga Cachengue y Sudor; y que muchas Murgas independientes en Capital Federal, tengan que esperar hasta marzo para poder realizar un corsos porque en su lugar de ensayo la prioridad la tienen corseros cuyos eventos tienen fines de lucro, entre otros.
Pero el estilo de Murga también fue expandiéndose por todo el país en los últimos años. Todos los años entre octubre y diciembre, se realizan dos encuentros a nivel nacional: uno de ellos en el pueblo de Suardi, en la provincia de Santa Fe, y el otro en el marco de la Marcha Carnavalera en La Plata. De esos encuentros surge el Movimiento Nacional de Murgas, del cual, además de Murgas Independientes de Gran Buenos Aires, reúne a numerosas murgas de distintos puntos del país (Mendoza, Santa Fe, Córdoba, Jujuy, entre muchas otras provincias).
Fuentes consultadas:
Puccia, Enrique: “Breve historia del carnaval porteño”, en “Cuadernos de Buenos Aires No XLVI”, Municipalidad de la ciudad de Bs. As; 1974.
Bajtin, Mijail: “La cultura popular en la Edad Media y el Renacimiento”, Ed. Alianza, Madrid, 1987.
Foucault, Michel: “Los anormales”
María Jones y María José Nacci: “Carnavales y Murgas Porteñas: antiguos y nuevos espacios de expresión urbana”
Revista Todo es Historia: “El Carnaval en la Gran Aldea”, por Daniel Omar de Lucía, febrero de 1995; ilustraciones de publicidad del carnaval de 1872
Martín A. Cagliani: “Historia del carnaval bonaerense”



Publicado en http://argentina.indymedia.org/news/2009/02/655465.php






El reclamo en Córdoba:

http://argentina.indymedia.org/news/2009/02/655817.php

El reclamo en Rosario:



http://argentina.indymedia.org/news/2009/02/653457.php



Doceava Marcha carnavalera de La Plata:



http://argentina.indymedia.org/news/2008/12/642899.php

1 comentario:

  1. desde la Asociacion de Murgas y Comparsas Marplatenses Les decemos a todos los amigoa murgueros y comparceros un excelente feliz 2010 llenos de la alegria de la musica hermosa del carnaval
    feliz 2010.
    carlos Arias Angelica Vaqueiro.
    Secretario Presidente
    AMyC
    www.fotolog.com/asociacion_myc
    asociaciondemurgasycomparsas.blogspot.com
    asociaciondemurgasycomparsas@hotmail.com

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